Los vídeos de peleas de dos jóvenes diferentes contra la misma persona, cuyo nombre es Ruymán, en Taco (La Laguna, Tenerife) se han hecho virales y han generado indignación porque, especialmente en uno de ellos, los que graban, lejos de intentar separar a los contendientes, parecen animarlos a que continúen el desagradable espectáculo y aplauden los golpes.

Se trata exactamente de dos vídeos (que se reproducen en este reportaje) en los que quien recibe los golpes es Ruymán, en aparente estado de embriaguez. Lo confirmó este hombre en unas declaraciones realizadas al programa Buenas tardes Canarias, de la Televisión Canaria: "Me pegaban porque estaba muy colocado".

De hecho, en uno de los vídeos, Ruymán aparece con una botella de cerveza en la mano.

Las peleas que aparecen en los dos vídeos tienen lugar exactamente en el barrio lagunero de San Matías, en Taco, y ocurrieron en las últimas semanas. Tuvieron lugar concretamente frente a un bar de la calle San Pedro. Ambas disputas tienen un denominador común cuyo nombre es el del mencionado Ruymán, un hombre de 37 años cuya historia está envuelta en drogas y violencia.

Estos comportamientos los atribuye él mismo al fallecimiento de su hermano Juan Antonio y a la ruptura de relaciones con su hijo Alexander, de quien habla entre lágrimas y con los sentimientos a flor de piel.

En la entrevista a Buenas tardes Canarias, Ruymán detalla cómo fue la pelea en la que recibió varios puñetazos de un hombre a quien éste había agredido en primera instancia. "Él vino mientras yo me estaba bebiendo una cerveza y ni me acuerdo de lo qué pasó".

Afirmó: "Perdí la noción del tiempo y sé lo que ocurrió porque vi los vídeos, porque estaba muy colocado". Además, contó que "cuando vi que recibía tanta caña me abalancé sobre él para hacerle un mataleón e intentar asfixiarle".

Pues bien, no sólo no lo logró, sino que empezó a "recibir puñetazos y, por tanto, a sangrar porque me abrió el piercing que tengo cerca de la ceja", dijo. De ahí en adelante, "ni me acuerdo de cómo llegué a casa".

No obstante, estas disputas no son algo ocasional. Ruymán reconoció que "en esa calle he tenido muchísimas peleas porque me coloco, me buscan y no me callo, porque a mí el que me la hace, me las paga".

A pesar de ello, a partir de ahora, asegura que se tomará "la vida con mucha más tranquilidad, porque lo único que quiero es volver a estar en contacto con mi hijo y ser un ejemplo para él".

Ruymán argumentó sobre los vídeos que "hasta un niño abusa de mí con lo colocado que estoy ahí... Y eso que yo hago boxeo y tengo mucha sangre".

Por otro lado, dedicó unas palabras a aquellos que aplauden los golpes durante las grabaciones. "Si me grabas en esas condiciones es que no eres mi amigo y no te mereces que te diga nada".

Finalmente, habló de su familia, de aquellos por quienes ha tomado la determinación de no volver a liarse a golpes contra nadie. "En mi vida, a quien más quiero es a mi madre, a mi hermana y a mi sobrino. Pero mi hijo, eso sí, es lo más grande que tengo en la vida. Y me emociono al hablar de él porque le echo mucho de menos. Ojalá pudiera oírme decir que daría todo por volver a tener una relación con él. Porque estaría dispuesto a darlo todo".