Una niña alemana de 7 años resultó en la tarde de ayer herida de carácter grave después de supuestamente sufrir una descarga eléctrica al montarse en una atracción mecánica infantil de un caballito en un local del Centro Comercial Anexo II de Playa del Inglés. Los familiares de la pequeña la trasladaron al puesto de Cruz Roja al quedar inconsciente y con quemaduras de segundo grado en un brazo y un pie. Una vez estabilizada y ante la gravedad de las lesiones, fue evacuada por una ambulancia hasta el Hospital Materno Infantil de la capital grancanaria. El negocio, por su parte, quedó precintado a la espera de una revisión que certifique que la instalación eléctrica se encuentra en perfecto estado.

Los hechos ocurrieron en torno a las 14.50 horas cuando, según testigos presenciales, la niña se encontraba alrededor de la máquina situada en el salón recreativo Alaska. Estas mismas fuentes aseguraron que uno de los empleados le advirtió en varias ocasiones de que mojada no podía utilizar el caballito. Sin embargo, en un momento dado, se produjo la descarga que, según indicaron fuentes que actuaron en el servicio, dejó a la pequeña con diferentes quemaduras. Su madre y su abuelo, que se encontraban en una terraza adyacente, se alertaron al escucharla llorar. Posteriormente, la pequeña quedó inconsciente, por lo que sus familiares la llevaron hasta el puesto que la citada oenegé tiene en la playa.

Allí le realizaron la primera atención. Según fuentes de esta organización, la menor fue recuperando su consciencia con el paso del tiempo. Asimismo, apuntaron que ante la gravedad de las heridas que presentaban, ordenaron la presencia de una ambulancia medicalizada del Servicio de Urgencias Canario (SUC) pese a que ya se había movilizado con anterior una de la Cruz Roja.

Los sanitarios evaluaron el estado de la afectada y decidieron que fuera trasladada hasta el Hospital Materno Infantil de la capital grancanaria, donde, según estas mismas fuentes, quedó ingresada con quemaduras de segundo grado -las más graves son la de tercer grado- en el antebrazo y en una pierna. Su estado era estable dentro de la gravedad, según informó el Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad (Cecoes) 112.

La Policía Local de San Bartolomé de Tirajana acudió al centro comercial para iniciar una investigación con la que esclarecer lo ocurrido. Así, una de las primeras medidas que se tomó fue precintar la atracción para, posteriormente, decidir cerrar todo el local ante la imposibilidad de que el responsable de la instalación eléctrica pudiera acreditar en ese momento que la instalación afectada se encontraba en buen estado, como señaló el concejal de Seguridad, José Carlos Álamo. Por ello, se espera que durante la mañana de hoy se realice una inspección para determinar si se levanta el precinto al salón recreativo.

En el lugar se personaron varios agentes, así como el comisario de la Policía Local, Isidro Armas, quienes tomaron declaración a los trabajadores del negocio y también a testigos de la zona. Entre estos últimos, los camareros de un local cercano aseguraron que apenas se dieron cuenta de lo que había sucedido porque todo ocurrió "muy rápido". "Escuchamos a la niña llorar y poco después la madre se la llevó", dijo uno de ellos.

Por su parte, otros testigos señalaron que uno de los empleados del negocio había advertido a la niña que mojada no podía subirse al caballito. Otras fuentes indicaron, por otro lado, que la menor estaba seca cuando fue atendida por los miembros de Cruz Roja.