Pedro Baggerman, conocido como el holandés, fundó hace 16 años en La Laguna (Tenerife) una tienda de víveres especializada en carnicería-charcutería que sus tres hijos han reconvertido en un establecimiento dedicado hoy a la comercialización de artículos gourmet entre los que destacan varios productos elaborados por ellos mismos con carne de cabra, como la cabradela -una versión de la típica mortadela-, el chorizo, las salchichas y el paté.
"La idea inicial surge hace varios años con la cabradela", cuenta Óliver Baggerman, el pequeño de una saga que completan sus hermanos Bernard y Stephan, actualmente propietarios y jefes de cocina en Baggerman, negocio donde Óliver Baggerman, modelo con importante trayectoria nacional e internacional, desempeña las labores de community manager. "Normalmente, para dar con una receta de este tipo", explica Óliver sobre sus productos con carne de cabra, "hay que asesorarse bien y trabajar con mucha paciencia en la fórmula hasta que se da con ella. Una de las claves del producto es su versatilidad en cuanto a público objetivo para su venta por varias razones: está elaborada siguiendo el rito halal -los musulmanes son clientes potenciales porque no comen cerdo-, por tanto la cabradela es ideal para su consumo; no contiene gluten; es 100% artesanal y su sabor es suave y fácil de combinar".
El local lagunero ha sido un clásico de la ciudad "donde los clientes compraban y pasaban un buen rato con nuestro padre. El modelo de negocio tenía muchísima aceptación en su día y lo más sorprendente es que a día de hoy también. Nosotros simplemente lo actualizamos, ofreciendo algunos servicios extra a nuestros clientes como el catering o las mesas en el local para consumir allí. Fue lo que comúnmente se llama un lavado de cara. De resto, trabajamos bajo la misma premisa que nuestro padre: hacer de nuestros clientes los mejores anfitriones en casa".
Otro de sus productos estrella es la cerveza artesanal. La elaboración, etiquetado y embotellado se produce en Tenerife bajo la marca Baggerman Spicy. "Este proyecto surge en parte por nuestros orígenes. Nuestra familia paterna proviene de Holanda y hablar de este país es hablar de uno de los mayores productores de cerveza del mundo. Nos sentimos muy atraídos por la idea", prosiguen los Baggerman, "y la pusimos en marcha con nuestros amigos del grupo Guaberze. Nuestra cerveza contiene tres especias que le aportan un sabor especial: salvia, hinojo y pimienta rosa. A día de hoy es uno de nuestros productos estrella y es, de hecho, la primera idea que lanzamos desde la apertura".
En su faceta de modelo, Óliver Baggerman recuerda sus inicios en la moda hace ya 8 años. "En 2008 me presenté a un casting para un programa de televisión: Supermodelo. Empezaba entonces mi aventura en este mundillo que no deja de sorprenderme. No había tenido nada que ver con la moda y hoy por hoy es mi profesión. Llegó sin querer", confiesa. "Es más, acompañaba a un amigo y no iba yo con muchas expectativas ni preparación. Tanto que como anécdota graciosa siempre cuento que para el casting pedían fotos y yo fui con dos tipo carné cuando, lógicamente, se referían a fotografías de estudio".
Fichaje de la agencia canaria POP House, "que dirige mi amigo Lartaun Pérez", dice Óliver, este profesional cuenta que su perfil como modelo "es bastante comercial, y en los años que llevo he trabajado para muchas marcas y editoriales. Suelo hacer bastantes cosas para firmas de ropa interior y spots de televisión".
Sobre su futuro profesional lo tiene claro: "Estoy en un buen momento y me gustaría seguir aprovechando la moda para conocer un poco más el mundo pero sin dejar de apoyar a mis hermanos en su aventura porque la familia es lo primero", concluye el pequeño de los Baggerman.
