Tomando prestado el título de un drama dirigido por Lawrence Kasdan, el historietista catalán Miguel Gallardo, afamado por ser el creador de personajes como Makoki, continúa su huida del cómic underground hacia el mundo del género biográfico que ya había dado lugar a obras tan galardonadas como María y yo donde cuenta su relación con su hija autista que reside en Gran Canaria. Turista accidental narra las aventuras, o más bien deberíamos decir, desventuras, de cualquier trotamundos que en plena globalización trata de realizar un viaje por este planeta y se encuentra con que la ciudad se le va quedando pequeño a una humanidad que se ha convertido en una plaga. De la mano del dibujante de Lérida, visitamos Praga, Frankfurt, Varsovia, Nueva York, Barcelona Xalapa y Tokio a través de unas viñetas que van aumentado de tamaño, hasta en el caso de México ocupar toda la página, con un dibujo esquemático y de trazo acelerado, casi sin colores, pero acompañado de pasajes de una ironía sutil y mordaz al mismo tiempo, que seguro traerá a más de uno el recuerdo de unas desafortunadas vacaciones.
