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Charcos redondos en los que guardar el engodo

Charcos redondos en los que guardar el engodo

De pronto algo que siempre había estado en la costa, junto a los charcos en los que se esconden los nerviosos pejes verdes, los camarones transparentes, y que se utiliza para meter el pan duro con el que engodar a los pescados más suculentos, puede tener otros usos y otro valor. Llama la atención que las cazoletas hayan pasado tan desapercibidas. Los pescadores de caña, que van en busca de los espigones más recónditos, con el único fin de localizar un buen lugar para llenar la cesta de viejas, ni se detenían en estas formaciones. Algunos suelen guardar dentro de estas pocetas los botellines de cerveza con los que pasar la jornada al sol. También hace años, cuando la costa estaba libre de plásticos y de otros contaminantes, algunos de estos agujeros, los menos profundos, servían para recoger la sal que se depositaba en ellos.

Julián, acompañado de su nieto, doña Rosa, la mujer del chinchorrero, todos iban con la cesta de mimbre en la cabeza, o apoyada a la cintura y la llenaba de la sal, que como escamas, se adormecía en estos 'charcos' próximos a la costa. Después en casa se extendía en la azotea, para que se secara al sol, como las jareas. Entonces nadie compraba sal, y ahora este ingrediente se vende en los comercios especializados como un producto gourmet. Eso ocurría en la Montaña de la Mar, un paraíso escondido que pervive detrás del Malpaís de Güímar en Tenerife.

Con la sabiduría natural que acompaña a los marineros canarios resulta llamativo que no tengan recuerdos de haber dado a estas cazoletas otros usos más necesarios. Y además, esta circunstancia le da a la gran pregunta que se hacen los investigadores una razón más sólida, para qué hacer tantas, sólo para escachar erizos y guardar lapas, no parece lógico ni práctico. La pregunta sobre estos otros usos, de momento, sigue más o menos en el aire. Y da a la teoría que plantean estos expertos, una forma mágica de comunicarse con sus antepasados, grandes posibilidades de confirmación.

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