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Música

Diez bandas y un destino

El teatro Guiniguada acoge el próximo fin de semana la sexta edición de Capital Sonora, donde compiten algunas de las más grandes promesas del rock insular

Diez bandas y un destino

Una de las plataformas de promoción para los grupos canarios más importante de las Islas es, sin duda, Capital Sonora. Dicha convocatoria llega a su sexta edición con una maratón de diez conciertos en el teatro Guiniguada que tendrá lugar los días 27 y 28 de enero a partir de las 20.00 horas, donde las formaciones optan a dos premios económicos y el prestigio que supone haber quedado primera.

Además, para los aficionados a la música se trata de una genial excusa para conocer el estado de salud de una parte de la música que se hace en el Archipiélago y saber cuáles son las principales tendencias que interesan a los jóvenes.

El jurado, encargado de hacer la última selección entre 25 formaciones tras una anterior criba en la que participaron casi un centenar, ha escogido a siete grupos procedentes de Gran Canaria, dos de Tenerife y uno de Lanzarote.

El certamen, que cuenta con el patrocinio del Gobierno de Canarias y la producción de Salán Producciones, ofrece dos premios en metálico, destacando el primer galardón de 2.000 euros a la mejor banda. El dinero será destinado a la financiación de un proyecto discográfico o de promoción de la banda. El segundo premio, con el mismo fin, es de 500 euros. Cada banda contará con 25 minutos de directo y en caso de sobrepasar este tiempo quedarían descalificadas. En la final, un jurado compuesto por personas vinculadas al mundo de la música, como programadores, periodistas especializados, críticos musicales o responsables de discográficas, serán los encargados de decidir qué dos bandas logran los dos premios.

En esta ocasión, las diez formaciones finalistas grancanarias son CT, Nimañana, I-Land, Flying Padre, Zeason, Heather Brooke, Familia Sanyo y Coche Altavoz, mientras que por Tenerife actuarán Baba Sall y de Lanzarote viene Inadaptados. El jurado que hizo esta última selección estuvo compuesto por Javier Viera, de La Brújula Guía de Ocio y Cultura; Néstor Garrido, de Mojo Club; Vicente Martín, director del programa radiofónico Bandeja de Plata, y Ardiel Zaya, de AlGato Producciones.

Finalistas

Las bandas finalistas podrán interpretar entre cinco y ocho temas sobre el escenario del teatro Guiniguada. Y será toda una oportunidad para disfrutar de todos los géneros posibles, incluyendo rock, hardcore, heavy metal, psicobilly, electrónica y música jamaicana. Un termómetro perfecto de la situación del pop que se hace en las Islas. Concretamente, el orden de intervenciones se ha resuelto de la siguiente manera en los dos días. El viernes 27 saldrán a escena, en esta secuencia, los grupos Nimañana, Heather Brooke, Familia Sanyo, Coche Altavoz e I-Land. Al día siguiente las formaciones subirán al escenario siguiendo este orden: Flying Padre, Inadaptados, Zeason, Baba Sall y, finalmente, CT.

Capital Sonora tiene como objetivo descubrir y promocionar a nuevos creadores musicales y por este motivo está dirigido a bandas de toda Canarias. Para participar los integrantes de las formaciones tuvieron que consultar las bases en la web del certamen www.capitalsonora.net y cumplimentar lo solicitado. Proyectos musicales como Bel Bee Bee, Texxcoco, Mondo Diávolo o Grenouille fueron premiados en las anteriores ediciones.

El responsable de la organización, Juan Salán, subraya que este año todo ha funcionado perfectamente y que no hay ninguna novedad con respecto a ediciones anteriores. "Ya se ha hecho la convocatoria y se ha procedido a una selección con un primer jurado", recuerda. "Ahora toca que esas diez bandas pasen a la final, y otro jurado, el próximo viernes y sábado, decida quién es el ganador".

Una fórmula que ya se utilizó el año pasado y el anterior y que ha funcionado muy bien. Para Salán con este premio "las bandas tienen un empujón en su carrera" como fue el caso de Texxcoco el año pasado y que ahora, afincada en Madrid, es una de las bandas revelación a nivel nacional. En su opinión, realizar esta selección es siempre muy complicado porque el nivel musical en Canarias es muy alto. "La cantera musical en las islas está muy diversificada, hay muchas bandas y muchos géneros", señala. Los ediciones anteriores han revelado auténticas sorpresas que permanecían ocultas para muchos aficionados de las islas. Así, Bel Bee Bee, el proyecto de Belén Álvarez Doreste y su banda, utilizaban una aleación de estilos personales que da lugar a algo cercano al pop y que se agenció con una gran cantidad de seguidores en pocos meses.

Así Se Murió, otro de los ganadores, se desenvolvían como una banda repleta de energía y puro rock con influencias que iban de Jimi Hendrix a Led Zeppelin, pasando por los Beatles con un excelente directo. Algo parecido fue el caso de Mondo Diávolo, cuya puesta en escena atrapaba por su mezcla de teatro, cabaré y un amplio abanico de influencias musicales, creando un escenario ideal para contar historias de formato musical. Otra auténtica sorpresa la protagonizaron los tinerfeños Grenouille, que demostraron en el escenario cómo son una banda compacta, compuesta por instrumentistas en su mayoría de formación clásica y con un buen directo, cuyo pop, inclasificable, se nutre de pinceladas de géneros contemporáneas que van del crooner al slowcore. "Este año ha habido una pequeña baja de participantes porque el periodo de convocatoria ha coincidido con el final de año". Sea como fuera, un total de 74 bandas entraron finalmente en esta primera la selección, a la que el año pasado acudieron más de cien. "Se apuntan bandas de todas las islas, este año hay cuatro bandas de Tenerife y una de Lanzarote; el festival, por tanto, tiene un carácter regional".

Empujón

Para Salán, Capital Sonora supone un pequeño empujón para los grupos, ya que las bandas que han ganado han tenido su proyección posterior, aunque algunas también se hayan quedado en el camino. Sin embargo, el festival les da la prestancia de los ganadores. "Y luego está el premio, que es para un proyecto musical, se tiene que invertir en algo referente a la música y eso es muy importante".

En cuanto al jurado son todos gente experimentada en el mundo de la música, como periodistas, DJ o profesionales de la industria de la música. "Nosotros no ponemos un baremo con la puesta en escena", aclara. En cuanto a la calidad de los grupos, este año ha habido muy buen nivel. "Pocas bandas vuelven a presentarse dos años consecutivos", aclara Salán. "Heather Brooks ha sido una excepción porque sí estuvieron en 2016. Pero cada año es una forma excelente de ver lo que se está haciendo en las Islas".

Para Salán, una de las cosas más interesantes de este evento es comprobar cómo la mixtura musical que existe en las Islas es única. "Al igual que existe un mestizaje de gente sucede algo parecido en la música, y eso da una cantidad de influencias que no he visto en otros sitios", aclara. Un ejemplo de todo esto tuvo como protagonista a Los Canarios, uno de los pioneros en la música de este país. "En Canarias siempre ha habido esa mezcla de influencias porque hemos recibido del exterior muchas influencias", recuerda. "Cuando en la Península por cantar en inglés y llevar el pelo largo te metían en la cárcel por vago y maleante, aquí había un grupo que cantaba en inglés, tenía el pelo largo y tocaba canciones como Ponte de rodillas. Siempre ha habido más libertad a la hora de componer y más referencias musicales que en el resto de España. Aunque, por desgracia, estemos fuera del circuito por la distancia, pero la gente se mezcla y toca".

Además, esta edición de Capital Sonora puede que genere una mayor atención en la Península ya que la anterior banda ganadora, Texxcoco, se ha convertido en la gran sensación del pop nacional. "Ellos tuvieron que irse a Madrid para poder darse a conocer", recuerda el promotor. "Pero ese es uno de los procesos naturales de las bandas insulares, ya que allí tienes más proyección y el concurso te da una prestancia". Texxcoco han terminado grabando en Clifford Records, donde también están los tinerfeños The Vinylos. Adriana Moscoso es la frontwoman y líder de este proyecto musical. Curiosamente, en un mismo año, en 2015, ganó dos concursos con dos bandas distintas: con Chasing Birds se llevó el premio en Lo Más Crujiente, y pocos meses después, disuelve éste y arma Texxcoco para encandilar al jurado de Capital Sonora. "Es otra de las características de muchas de las bandas de aquí", reconoce el organizador. "Continuamente te encuentras con formaciones que surgen de las cenizas de otras". Pero, centrándonos en lo que se encontrará el espectador que acuda el próximo fin de semana al Guiniguada, este se encontrará con una gran variedad de estilos musicales.

Así, a los que les guste el rock corpulento, con un dominio instrumental fuera de toda duda, pueden disfrutar del sonido entre setentero y contemporáneo de CT, o del rock and roll de alto octanaje de Inadaptados. Aquellos que opten por sonidos más pesados y contundentes tienen una cita con el hardrock de I-Land y el metal hipnótico industrial de Heather Brooke. Los primeros destacan por un repertorio de temas propios al más puro estilo americano con influencias que van de Mr. Big a Richie Kotzen, pasando por Steely Dan, Van Halen o David Lee Roth. Los segundos representan un metal progresivo bastante impactante que bebe de formaciones tan decisivas como Tool, Rage Against the Machine y la etapa más experimental de King Crimson.

Los que persigan el rock más tradicional se sorprenderán con el rock de Coche Altavoz que recuerda a veces a Los Enemigos y Deltonos que muestran un repertorio que surge de una clara influencia del blues. O incluso los que prefieran el dance tiene su parcela como Familia Sanyo, una banda de música alternativa que fusiona varios estilos y ritmos con bases electrónicas, en una onda parecida a Delorean, y que reconocen su admiración hacia nombres como Whomadewho, The Rapture, Justice u Organic Audio. Por otra parte, los que prefieran una onda entre el heavy y el indie pueden rememorar la escena alternativa de los noventa con Zeason, otro quinteto que no esconde su admiración hacia lo que hacen Metallica, Pink Floyd, Pearl Jam, Alice In Chains, Guns N' Roses y Led Zeppelin. Por otro lado, los que se decanten por los sonidos más tropicales se puede bañar con la esencia del Caribe en Baba Sall, un grupo de reggae con fuertes connotaciones africanas, letras de temática social cantadas en inglés, español, francés y wolof. Y, por último, la electrónica experimental estará representada por Flying Padre, un dúo de dance e Indie formado por Guillermo Mederos Ojeda y Víctor H. Gutiérrez Duque que ofrece temas en los cuales tienen cabida desde el krautrock hasta el tecno.

Un cartel, en definitiva, de lo más suculento, y una oportunidad, insistimos, para poder ver en dos días a algunas de las formaciones que mejor en forma se encuentran en estos momentos en las Islas. En este caso, además, la asistencia está más que justificada ya que todas las bandas han demostrado un dominio instrumental fuera de toda duda, si bien es cierto que la mayoría todavía están en los comienzos de sus respectivas carreras. Puede que estemos ante la nueva revelación del rock insular como sucedió el pasado año con Texxcoco.

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