El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha mostrado su confianza en que el Congreso y el Gobierno puedan llegar a un acuerdo para elevar el límite de deuda en "una o dos semanas", porque ha advertido que en el caso contrario la economía estadounidense podría caer en una nueva recesión económica.

En una entrevista en la que respondía a preguntas planteadas por los ciudadanos a través de la red social Twitter, Obama también instó a que no se use el tema como "una pistola en la cabeza" de los estadounidenses para lograr mantener beneficios fiscales.

Por otro lado, no descartó que el Gobierno recurra a la decimocuarta enmienda para incrementar el límite si no logra el apoyo del Congreso, pero confió en que el debate no llegue a este punto.

El presidente estadounidense incidió en que si no se eleva el límite de deuda el Tesoro no podrá hacer frente a sus pagos, podría empeorar la calificación crediticia del país, elevar los tipos de interés y hacer que la situación entre una espiral que provoque una segunda recesión económica "o peor".