La peseta podría tener protagonismo en la sesión plenaria del Ayuntamiento de Telde. Quince años después de su muerte oficial para dar paso al euro, la antigua moneda oficial española será probablemente nombrada más que su sucesora al menos por un día. La razón, que los miembros de la corporación municipal debaten este martes, en sesión ordinaria, la aprobación de los presupuestos generales del consistorio para este ejercicio, que se elevan a 82 millones de euros.
Y allí, como salidas de las catacumbas, a buen seguro que, sobre todo desde el grupo de gobierno, se podría hablar de deudas pendientes de pago y que se había facturado en pesetas en un tiempo que parece ya muy lejano, pero solo han transcurrido tres lustros. La culpa, claro, será para los mandatos de Francisco Santiago, el alcalde que más etapas ha consumido en el sillón de la alcaldía.
El mandato iniciado en junio de 2011, con un pacto de gobierno tripartito PP-Ciuca-CC que se rompería dos años después y sustituido por otros nuevos socios, nació con una losa económica que obligó, desde sus comienzos a adoptar medidas a cara de perro para lograr el saneamiento financiero de esta administración local. A toque de corneta, la consigna era la necesidad de ejecutar un duro plan de ajuste para reestructurar todos los pagos retrasados a proveedores que estrangulaban las arcas municipales.
A 31 de diciembre de 2011 se encontraban consignadas un total de 13.260 facturas, algunas de ellas incluso registradas en pesetas al tratarse de pagos retrasados anteriores a la entrada en vigor del euro, que se produjo el 1 de enero de 2002. Facturas guardadas en algún cajón durmiendo el sueño de los justos, ya que aún se mantenían impagadas con el consiguiente coste para las empresas que habían prestado sus servicios a la entidad municipal.
Deuda comercial
Estas 13.260 facturas suponían un total de 116 millones de euros de deuda comercial que no se encontraba reconocida y que pudo renegociarse por una cantidad de casi 114 millones de euros. La realización de estos pagos ha sido una de las principales actuaciones llevada a cabo en este mandato para poder restituir tales cantidades a aquéllos a los que se les adeudaba. Un total superior a los 200 millones de euros que situaban al municipio entre los más endeudados del país, que había arrastrado y colocado en serias dificultades económicas, cuando no en la bancarrota, a numerosas empresas del municipio y que amenazaba con llevar al propio Ayuntamiento a una intervención por parte del Estado.
"El pago de esta enorme deuda comercial ha llevado consigo un aumento de la deuda financiera, situándola en torno a los 114 millones de euros, pero a día de hoy se han podido pagar casi 100 millones de euros y devolver 15 millones de euros sólo en amortizaciones, a los que esperamos añadir otros 14 millones de euros a lo largo de este año", expuso el responsable de Hacienda del Ayuntamiento teldense, Darío López.
Tres planes de pagos a proveedores logrando financiar deudas por 44 millones en el 2009, por 72 millones en el año 2012 y 17,8 en el ejercicio 2013, y cuatro años después, la situación es otra. "Hemos salido al fin de la UVI y nos encontramos en planta", explica muy gráficamente la alcaldesa de Telde, María del Carmen Castellano, que recuerda cómo al principio del mandato los pagos se realizaban a 1.089 días, es decir, casi tres años, lo que mantenía "absolutamente asfixiados a nuestros proveedores y hacía en ocasiones complicado obtener crédito hasta para la compra de folios, tal era la situación, absolutamente inviable porque el Ayuntamiento de Telde estaba abocando al cierre al pequeño y mediano empresariado del municipio, auténticos generadores de empleo y riqueza", relata la primera mandataria.
"Y nuestro mayor éxito" -continúa Castellano- "ha sido acabar con esta situación manteniendo los servicios del municipio. No ha sido la situación ideal y ha conllevado numerosas decisiones que a ningún político le gustaría tener que tomar. Es muy fácil gobernar con dinero y muy complicado hacerlo sin él, pero la situación requería de responsabilidad política por el bien del municipio. Un trabajo con el que hemos evitado el colapso del Ayuntamiento, haciendo así un ejercicio de responsabilidad porque no trabajamos pensando en las próximas elecciones sino en las próximas generaciones".
Servicios básicos
Fruto de este trabajo el Ayuntamiento ha podido reducir el IBI finalmente en un 15% durante este ejercicio 2015, con lo que "pretendemos devolver a la ciudadanía parte del esfuerzo que ha hecho estos años por sanear la casa de todos que es este Ayuntamiento, sin afectar a los servicios básicos ni recortar las ayudas sociales tan necesarias en estos tiempos", explica Castellano.
De hecho, la Auditoría de Gestión del Fondo Canario, que anualmente elabora la Viceconsejería de Administración Pública del Gobierno de Canarias, considera en su último informe que el Ayuntamiento de Telde "en la liquidación de su presupuesto del ejercicio de 2013, presenta de forma matizada una evolución positiva en lo relativo a su gestión económica financiera y presupuestaria en relación al ejercicio 2012, recuperando paulatinamente los indicadores de salud financiera que establece la Ley del Fondo Canario de Financiación Municipal". Un informe que además puntualiza que la presión fiscal en el municipio es de 333 euros por habitante, muy por debajo de los 469 euros de la media regional.
Esta es la situación económica con la que el grupo de gobierno lleva a pleno el último presupuesto de la legislatura, que Castellano ha calificado como "racional, prudente, austero, responsable con las circunstancias actuales, ajustado, equilibrado y realista, y sobre todo coherente con la realidad económica, con unas partidas tanto de gastos como de ingresos que seguirán manteniendo la confianza de los ciudadanos de Telde, siempre en aras del buen gobierno de la ciudad, una vez alcanzada la normalización presupuestaria en estos años de corporación".
Un total de 80.593.869,24 euros que supera en casi 1,9 millones de euros la cantidad consignada en el año anterior y que cuenta con un presupuesto total consolidado, por su parte, de 82.204.730 euros sumando la cantidad consignada para las empresas públicas Gestel y Fomentas, siendo los ajustes por consolidación del importe de 1.516.582,49 euros.
El próximo martes el Pleno debatirá su aprobación y con él rendirá cuentas el grupo de gobierno por su gestión económica de estos cuatro años en Telde ante el resto de partidos políticos que componen la corporación municipal. Será el segundo debate relevante en menos de dos semanas, después de la aprobación inicial del Plan General de Ordenación la pasada semana, a la que se sumaron sorpresivamente tres votos procedentes de Ciuca, y que comenzará su exposición pública mañana en la Casa Condal. Durante el transcurso de la sesión se desvelará si salta de nuevo la sorpresa. Sea así o no, la peseta habrá tenido sus minutos de gloria, aunque haya sido para recordar incumplimientos.
