Cuatro mujeres se afanaban ayer por la mañana en la iglesia de Lomo Magullo. Querían que todo estuviera preparado para recibir a los romeros que ofrecían su ofrenda a la Virgen de las Nieves y que la imagen de la patrona del barrio luciera lo mejor posible hoy, el día grande de la festividad. María del Carmen Sánchez, Nieves Sánchez, Cristina Almeida y Amalia Sánchez estaban atareadas, cada una en su cometido. No estaban muy por la labor de ser fotografiadas "por las pintas que llevamos", decía una de ellas, pero finalmente decidieron posar junto a la talla.
María del Carmen se encargaba de buscar hueco para colocar las flores que adornan el paso en el que va la Virgen de las Nieves, una labor que realiza desde hace más de 30 años y en los últimos 25 en solitario. "Empecé muy joven con esta tarea, primero con otras personas y desde hace ya bastante tiempo me encargo yo sola". La imagen, traída de Valencia por encargo del padre Collado hace un siglo, lucirá en todo su esplendor con la compañía de gladiolos, lirios, anturios y anastasias, además de hojas verdes de filodentro o helechos. La elección de este adorno floral no es una casualidad, se debe, según explica esta vecina, "a que son flores que aguantan varios días y llegan al día grande sin problemas, no se marchitan pronto como le pasa a las rosas".
Sus tres compañeras de faena, su hermana Nieves, Cristina y Amalia se dedicaban a adecentar la pequeña iglesia. Cepillos, baldes, bolsas de basura y hasta un contenedor para depositar todo lo desechable era la imagen que se podía observar en un día que no era en esos momentos -algo menos del mediodía- caluroso y en un ambiente de sosiego, solo interrumpido por algún vehículo y poco más.
Apenas había gente en ese momento en la calle, entre ellos Armando Quintana, presidente del Patronato El Manantial, organizador de la fiestas, que andaba de un lado para otro ultimando los detalles, no solo de los actos de ayer por la tarde, sino en la búsqueda de solución al traslado de la feria de ganado que se celebra hoy en el día grande de los festejos. Con varios voladores en la mano, el móvil en la otra, Armando comprobaba que las campanas estuvieran a punto para su repique una vez se lanzaran los voladores. Y así fue, sin grandes alardes, pero con la intención de hacer las cosas bien, el pago teldense saludó el mediodía con una pequeña traca y el sonido característico de las campanas. Las fiestas habían empezado.
Son unas fiestas especiales para Lomo Magullo, ya que la celebración de un centenario es un acontecimiento destacado y si se trata del homenaje a la imagen de la patrona del barrio, qué decir. Nieves es el nombre de referencia para las niñas y mujeres del pago, como lo pueden ser los apellidos Sánchez o Florido, también muy extendidos aquí. Un centenario que, además de llenar de orgullo a sus vecinos, supone un recordatorio de la importancia de la veneración de la Virgen de las Nieves en este pago como en el resto del municipio de Telde.
Un bastón fino, de color negro, adquirido por el anterior equipo de gobierno, evidencia lo dicho. Es el bastón de mando que sujeta la talla como "celestial alcaldesa mayor y perpetua de la ciudad de Telde", un honor concedido hace 38 años y del que los residentes en Lomo Magullo muestran su satisfacción.
"El anterior bastón, que se le entregó cuando fue nombrada alcaldesa hace 38 años estaba bastante estropeado y el Ayuntamiento compró uno nuevo", señalan cuando se pregunta por el báculo.
Antonio González Padrón, cronista oficial de Telde y conservador de la casa museo León y Castillo, recuerda que la veneración a Nuestra Señora de las Nieves llega a Gran Canaria de manos de Antón Cerezo. "Compró al Adelantado de Canarias el Valle de Agaete y se trajo de La Palma, donde residía, el tríptico en honor de la Virgen de las Nieves y luego se extendió la veneración al este de la Isla, siendo impulsada posteriormente por el padre diocesano Antonio Collado, que introdujo el culto".
González Padrón recuerda lo que ha sido el himno a la Virgen en Lomo Magullo: "Virgen de las Nieves de Lomo Magullo, nuestros corazones siempre serán tuyos".
Y es esa veneración a Nuestra Señora de las Nieves el que tuvo ayer uno de sus actos principales con la romería ofrenda en la que cinco carretas de sendos barrios de Telde recorrieron las calles de Lomo Magullo hasta llegar a la iglesia. Los cinco pagos participantes fueron, además del de Lomo Magullo, el de Arenales, Cazadores-La Breña, Malpaís y Roque Azucarero, que representaba al de San Gregorio.
Vestidos con vestimenta típica canaria, los participantes iniciaron el recorrido desde el barrio de Arenales, empeño en el que emplearon unas tres horas con una temperatura que se podía soportar y que tuvo como destino final la plaza de Lomo Magullo. Allí se ofreció a la imagen los productos traídos por los romeros para su posterior reparto a las personas más necesitadas, un acto que combina la alegría de la música y los cantos con la devoción a la patrona del barrio.
Una vez finalizó la romería, que se inició a partir de las siete de la tarde, se inició, ya a las 22.30 horas, una verbena de la víspera del día grande a cargo del grupo Güira Latina, que amenizó la noche hasta la llegada de los esperados fuegos artificiales, a partir de la medianoche.
