Los desahucios deben dejar de convertirse en el angustioso problema que acogota a miles de canarios, que son desalojados de sus hogares por el impago de los alquileres o de las hipotecas. Con esta filosofía se celebró ayer la primera reunión de la Mesa de Prevención de Desahucios, una iniciativa del Ayuntamiento de Telde que pretende implicar a todas las administraciones públicas y colectivos en la resolución de este grave problema social no solo en el municipio, sino en todo el Archipiélago. El cambio de la s políticas de vivienda y arrimar el hombro entre todos se presenta como la solución.
La primera cita logró reunir a un nutrido grupo de participantes, desde instituciones públicas como el propio Ayuntamiento o el Cabildo de Gran Canaria, como colectivos sociales, entidades bancarias o colegios profesionales. Sin embargo, en esta nómina de asistentes no se encontraba el Gobierno de Canarias, precisamente la administración pública que tiene las competencias en exclusividad en materia de vivienda. Pese a ser invitado, nadie del Ejecutivo regional se personó en el acto.
Esta decisión deja, al menos inicialmente, en agua de borrajas cualquier iniciativa que se realice para acabar con los desahucios, pero durante el encuentro se consideró vital que el Gobierno participe en este foro, ya que debe ser esta institución la que ha de orientar las políticas de acceso a la vivienda, unas políticas que, a tenor de los datos facilitados ayer, no han servido para atender la demanda de pisos de los canarios.
La alcaldesa de Telde, Carmen Hernández, que estuvo acompañada por los tenientes de alcalde Juan Francisco Artiles, Alejandro Ramos y Juan Martel, hizo un resumen de la situación socioeconómica de Telde, que calificó de especial gravedad, al poseer una tasa de desempleo del 32% -14.666 parados según el Observatorio Canario de Empleo a 31 de agosto de 2015- y un índice de pobreza del 33%. Con estos datos, Hernández informó de que existen 3.792 demandantes de viviendas en el municipio, que choca con otra cifra destacada: la ciudad tiene 7.062 inmuebles vacíos, tanto públicos, propiedad de los bancos o promociones privadas. Sin embargo, señaló la alcaldesa, esta realidad no es aceptable: "es inconcebible", dijo", que en Telde haya casas sin gente y gente sin casas", uno de sus argumentos más reiterados para abordar este problema.
Finalidad de la Mesa
A la espera de la participación del Gobierno regional, entre los objetivos generales de la Mesa de Prevención de los Desahucios se encuentran el impulso del Servicio de Mediación Hipotecaria y buscar alternativas ante la emergencia social que genera riesgo de desahucio. Entre ellas, estudiar la situación de las promociones de vivienda pública y movilizar el parque de vivienda vacío.
Otras propuestas presentadas en esta primera cita del foro antidesahucios fueron la necesidad de agilizar los trámites bancarios y administrativos para evitar los alzamientos de viviendas, la creación de un mecanismo que investigue la situación del parque de viviendas sociales del municipio para saber cuántas podrías volver a adjudicarse y eludir situaciones irregulares en las mismas.
El perfil medio del demandante de vivienda en Telde es de una mujer soltera, de entre 26 y 55 años que tiene a su cargo entre uno y cuatro niños, según se expuso en la reunión. Sin embargo, aunque el grupo de gobierno ha efectuado una serie de acciones para garantizar el derecho a la vivienda a los ciudadanos con menos recursos, también se hizo hincapié en que debe modificarse el mecanismo de adjudicación de las casas sociales, eliminando el sorteo actual por la designación según las características de cada demandante, así como impulsar el alquiler social y controlar las viviendas vacías.
