La Sala de Conflictos de Jurisdicción del Tribunal Supremo (TS) ha dado la razón al juzgado de instrucción número 2 de Telde frente al juzgado togado militar número 52 sobre la instrucción de una denuncia por un presunto delito contra la integridad moral y acoso sexual presentada por una soldado en contra de otro militar. El juez togado había solicitado instruir el caso y ante la negativa de la sala de Telde de inhibirse presentó un conflicto de jurisdicción.
En los antecedentes de hecho, el TS relata que la soldado denunció ante tres superiores que el 17 de octubre de 2014 un cabo irrumpió en su habitación "insultándola, pidiendo explicaciones de su vida personal y, finalmente, agrediéndola físicamente según refiere". El Tribunal Togado Militar número 52 pidió la inhibición del juzgado de instrucción número 2 de Telde, pero éste rechazó la petición al considerar que la instrucción del caso corresponde a la justicia ordinaria, en concreto al Juzgado de la Violencia sobre la Mujer de Telde.
No es un caso de justicia militar
El Tribunal Supremo, en los fundamentos de derecho de su sentencia desestima el argumento del juez togado, que defendía que la denuncia debía quedar bajo la jurisdicción militar porque "la relación jerárquica entre militares esde carácter permanente, que se proyecta fuera del servicio y se mantiene con independencia de cualquier condicionamiento, fijando el empleo militar la posición relativa entre estos".
Sin embargo, el TS estima que la denuncia de la soldado, expareja del cabo, con quien tiene un hijo en común, pertenece al ámbito sentimental, independientemente de su relación profesional.
