La factura por los daños sufridos por los efectos del temporal de agua que se cebó con Telde ya tiene cifra: al menos unos ocho millones de euros, según un primer informe elaborado por los técnicos del Ayuntamiento. Una cantidad que no incluye, como recordaba ayer la alcaldesa, Carmen Hernández, los desperfectos ocasionados en las carreteras teldenses y en las infraestructuras municipales. La regidora se comprometió a remitir ese informe al Estado y aprovechó para pedir a los gobiernos central y autonómico -este último sin representante en la visita a Telde - ayudas "para las familias y las infraestructuras más afectadas" por las lluvias torrenciales.

Hernández, que visitó las playas de Salinetas, Melenara y La Garita, dañadas por el temporal junto al ministro de Industria, Energía y Turismo, el teldense José Manuel Soria; la delegada del Gobierno central en Canarias, María del Carmen Hernández Bento; el comandante de Unidad Militar de Emergencia (UME), José Antonio Prieto, y varios concejales de la corporación, solicitó al ministro la mayor celeridad en la entrega de las ayudas excepcionales por el Ejecutivo nacional ostentado por el PP.

El titular de Industria, que inició en Salinetas -cala en la recordó ayer que veraneaba de niño y joven- la visita al litoral, recogió rápido el guante lanzado por la regidora municipal y aseguró que "Mariano Rajoy ha estado siguiendo al detalle los efectos de las lluvias, que han afectado a Gran Canaria, Lanzarote y Fuerteventura, pero en especial a Telde". De hecho, Soria confió en que en que el Consejos de Ministros pueda adoptar esta misma semana medidas excepcionales concretas para paliar los efectos de "la catástrofe" registrada en Canarias por las lluvias y donde su municipio natal ha sido muy castigado por las dos trombas de agua que descargaron unos 130 litros por metro cuadrado.

El representante estatal alegó, además, que ya no existe la declaración de zona catastrófica como reclaman el Ayuntamiento y el Cabildo de Gran Canaria, ya que en 2005 se suprimió por decreto esa figura jurídica y se ha sustituido por las medidas adoptadas por el Consejo de Ministros de manera excepcional para atender las catástrofes que ocurran en España.

No obstante, Soria insistió ante las autoridades municipales en que el Gobierno de España ya está evaluando los daños producidos por las lluvias, ya que Rajoy "ha dado instrucciones a los ministros de Interior, Fomento y Medio Ambiente y Agricultura para que con la mayor celeridad se realice esa evaluación y se puedan decidir las medidas necesarias en un próximo Consejo de Ministros.

Desde el Cabildo de Gran Canaria, su presidente, Antonio Morales anunció que los destrozos son innumerables y supondrán millones de euros según los datos que van recabando los servicios insulares para elaborar un informe de los daños ocasionados por el temporal a su paso por Gran Canaria.

Morales anunció que hoy encargará a un técnico su coordinación, mientras los consejeros de Obras Públicas y Soberanía Alimentaria, Ángel Víctor Torres y Miguel Hidalgo, recopilan datos para elaborar el impacto de los aguaceros en esas áreas. Al mismo tiempo, pedirá a los ayuntamientos de Telde y Las Palmas de Gran Canaria sendos informes sobre los daños.

Asimismo, desde la corporación insular se señala que vigilará si en las próximas 48 horas se producen nuevos daños si hay más precipitaciones para incluirlos en el informe que se remita al Gobierno de España, según se anunció desde la Dirección del Plan de Emergencias Insular.

Este anuncio llegó con la vuelta de las precipitaciones a Gran Canaria, otra vez con mayor incidencia en Telde, aunque también se desplazaron al Sur y al Sureste. Casualmente, la llegada del ministro, que se había retrasado, coincidió con el inicio de un palo de agua durante algo más de una hora en Telde y que obligó a guarecerse del chaparrón toda la visita.

No hubo que volver a activar el dispositivo de emergencia, que tras unas jornadas maratonianas, como reconoció Juan Martel, concejal de Seguridad, "todos hemos terminado reventados y nos hemos ido a descansar". Un decir, porque los efectivos desplegados por la tormenta aún seguían pendientes, ya con menos estrés, y los propios políticos reflejaban en sus rostros la paliza dada.

Así lo reconocía Eloy Santana, edil de Limpieza Viaria, que alegó que "pese a que esto ha sido duro, nos valdrá para ver en qué tenemos que mejorar, aunque nos han felicitado otras instituciones".