El colegio León y Castillo apuesta por la vida saludable de sus alumnos cambiando su hábitos diarios con una buena alimentación y el desarrollo de ejercicio físico. A través de talleres y charlas educativas los menores aprenden a cambiar los chocolates por la fruta y la videoconsola por la actividad deportiva. Además, el centro se mueve por impulsar una educación en los niños que rebote en sus familias para fomentar la rutina saludable también en el hogar.
En el acto de ayer, los pequeños entre tres y doce años hicieron aerobic guiados por sus profesores de Educación Física. Algunos padres que estaban allí se sumaron, también, a la actividad. "Esa es la idea, que los niños eduquen a sus padres con hábitos de vida saludables y favorezcan en reconducir conductas que no son buenas", explicó Benito Galván, profesor del centro, que comentó que "no es solo para los niños, sino para toda la sociedad, que debería practicar alguna actividad física".
El colegio lleva un programa anual que tiene como finalidad favorecer estas conductas saludables y concienciar a las familias de lo importantes que son para el desarrollo de los niños y para todos.
Así, una vez al mes, 300 alumnos de primaria reciben clases de yoga y pilates en el colegio, "que son muy importantes no solo porque hacen ejercicio, sino por lo que les ayuda en la concentración y en el bienestar", aseguró Galván. Además, reciben constantes charlas por parte de dietistas y médicos de los hospitales públicos de la Isla sobre la buena alimentación, que después llevan a la práctica con desayunos colectivos y otras actividades.
También se ha iniciado un ejercicio de concienciación con los padres que pueden acudir algunas tardes al centro para asistir a conferencias dadas por profesionales especializados en el tema.
Con motivo de la campaña, cada clase este año se disfrazará por carnavales de diferentes disciplinas deportivas, para aprender que divertirse y vivir de una manera saludable pueden ir de la mano.
