Las mujeres tendrán voz y voto en el Casino La Unión. No será la primera vez que ocurra, ya que en los dos últimos mandatos ha habido presencia femenina en la junta directiva de la sociedad recreativa y cultural de San Juan, pero de cumplirse el deseo del presidente, Claudio Ojeda, sería la participación más numerosa.
La dimisión de cuatro socios críticos con la gestión de Ojeda -más dos abandonos anteriores- ha dejado coja a la junta directiva, integrada por 13 miembros porque no se ha cubierto la plaza de vicepresidente y según el artículo 42 del reglamento del Casino, "en el supuesto de que las vacantes excedan de un tercio [seis, casi la mitad] de los miembros de la junta, se convocará junta general extraordinaria en el plazo máximo de un mes al objeto de cubrir dichas vacantes".
Esta circunstancia pretende aprovecharla el presidente para "incluir a mujeres en la directiva para darle otro aire a la gestión y así podremos cumplir con la ley de igualdad y de paso modificar el reglamento que solo permite ser directivo si se tiene una antigüedad mínima de dos años como socio".
Ojeda admitió que en las dos juntas, ordinaria y extraordinaria celebradas el lunes "hubo momentos de tensión, donde cuatro socios criticaron que yo había organizado actos sin comunicárselos y haber aprobado asuntos sin contar con el resto de la directiva, algo que les dije que era falso". Los cuatro miembros de la junta directiva -Mauricio Cruz, Antonio Benítez, Francisco Artiles y Antonio Santana- anunciaron su dimisión y otro socio votó en contra de las cuentas.
Benítez declaró ayer que "algo no debe estar bien cuando se han ido seis miembros de la directiva durante el mandato, pero desde enero la situación se puede calificar de inaguantable por la actitud del presidente, que ha quitado funciones al jefe de sala frente a la concesionaria del restaurante". El exvocal de la junta directiva también insinuó posibles irregularidades en las actas de las sesiones.
La noche del lunes no solo tuvo como hecho destacado el desencuentro entre los sectores oficial y crítico del Casino que terminó en la dimisión de los cuatro directivos, sino que se aprobaron las cuentas del presupuesto de 2015 y las nuevas cuentas para el presente año.
Claudio Ojeda destacó que el año pasado el Casino tuvo un superávit de 12.900 euros y las previsiones para 2016 también auguran un saldo positivo para la sociedad recreativa. Según las cuentas presentadas para su aprobación, este año el presupuesto asciende a unos 66.000 euros y unos gastos de 50.000 euros. Los ingresos vendrán de las cuotas de los socios, unos 56.000 euros, de la celebración de eventos y de los 1.000 euros mensuales del restaurante, del que destacó "la profesionalidad y cumplimiento de sus funciones".
