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Elecciones Análisis de los resultados del 26-J en Telde

El PP sigue como el gran dominador de las elecciones generales en Telde

Los populares se imponen en los seis distritos del municipio y logran 134 de las 175 mesas electorales

El Partido Popular (PP) mantiene su apabullante hegemonía en todas las elecciones generales en Telde -siempre ha sido la fuerza política más votada- con su victoria en 134 de las 175 mesas electorales del pasado 26 de junio. A mucha distancia quedan la alianza electoral PSOE-Nueva Canarias, con 25 mesas ganadas y Podemos, con 16 urnas como fuerza más votada. Estas tres formaciones fueron las únicas que se alzaron con mesas electorales, mientras que el resto apenas tuvieron presencia. La entente entre nacionalistas y socialistas desbanca a la formación morada del liderato de la izquierda y se coloca en segundo puesto en Telde.

En el Senado, los dos candidatos del PP también se impusieron con holgura a la candidata de socialistas y nacionalistas en la ciudad, que ocupó la tercera plaza. Incluso la aportación teldense es superior a la media nacional en casi punto y medio -33,03 en España frente al 34,48% en la localidad-. Todo un valor seguro para Rajoy.

Los partidos que lograron unos resultados considerados normales -el resto oscilaron entre 0 y casi 200 votos en algunas urnas- son Coalición Canaria (CC) y Ciudadanos. Los nacionalistas, con un candidato vecino de la ciudad, Pablo Rodríguez, no remonta, pierde sufragios y vuelve a ser superada por Ciudadanos, ésta en cuarta posición.

Y aunque no puede ser trasplantado a los comicios locales, donde en los últimos sufrieron un importante batacazo con la pérdida de cinco de sus ocho ediles, el resultado es visto desde la ejecutiva popular teldense como un balón de oxígeno después del trauma del pasado mayo de 2015. Y apacigua, al menos en estos momentos de euforia, las críticas de miembros del partido por la sucesión de María del Carmen Castellano, cuyo testigo lleva ahora Sonsoles Martín.

Con este resultado, los populares -incluso cuando se presentaron como Alianza Popular-PDP en 1982, el gran año del triunfo socialista- pueden presumir de ser el único vencedor en el municipio desde que se instauró el sistema democrático en España. La Ciudad de los Faycanes se vuelve a teñir de azul, uno de los dos colores de su bandera. El otro, el rojo, sigue sin pintarse en el mapa de los comicios legislativos en el municipio.

Las buenas noticias para la formación conservadora se amplían con su triunfo en todos los distritos electorales de Telde, donde arrasó en la preferencia de los votantes, salvo en Jinámar, donde su victoria ante PSOE-Nueva Canarias y Podemos se produjo por la escasa diferencia de 593 y 595 votos respectivamente. La pelea por la segunda plaza la ganó la alianza a los emergentes por solo dos votos.

Otro dato para la curiosidad es que los populares se impusieron en todas las mesas instaladas en los distritos del Casco, Centro y Cumbre, sin dejar una urna para el resto y en los otros tres -Costa, Medianías y Jinámar goleó a sus otros dos competidores en las urnas. Salvo en Jinámar, donde la suma de las mesas donde triunfaron PSOE-Nueva Canarias y Podemos alcanzan las 15 frente a las 13 del PP.

Asimismo, el 34,48% de los votos obtenidos por la formación que preside Mariano Rajoy es uno de los mejores resultados de la historia del partido en los comicios legislativos en Telde. Además de superar la media nacional obtenida por esta formación el pasado domingo, ha conseguido remontar nada menos que casi seis puntos más de apoyos frente al porcentaje logrado en diciembre de 2015, con un 28,8% de los sufragios.

La mayor alegría, sin embargo, la tuvo el Partido Popular de Telde en las elecciones generales celebradas el 20 de noviembre de 2011, con un porcentaje del 56,23% de los votos y la friolera de 27.528 sufragios. Un resultado que ayudó a encumbrar a Rajoy a la presidencia del Gobierno de España. Con unos números tan espectaculares sus apoyos en las dos últimas elecciones -diciembre 2015 y junio 2016- son inferiores en más de 20 puntos porcentuales, pero después del leñazo sufrido en 2011 en las locales, las cifras son ahora optimistas.

El color azul, preponderante en todos los distritos del municipio, como ha ocurrido en la mayoría del Estado, es muy significativo en varios de los seis distritos de Telde. La victoria en los distritos Casco, Centro y Costa, tres de los más poblados, le ha supuesto un importante número de apoyos y en Jinámar, donde también venció, se hizo con 13 de las 28 mesas, seguido de cerca por PSOE-Nueva Canarias, con nueve y Podemos, que logró el triunfo en seis de ellas.

Así, una de las primeras lecturas que puede hacerse es que el PP no solo recupera, sino refuerza sus tradicionales feudos y en la batalla por el segundo puesto, socialistas y nacionalistas desplazan a Podemos. La alianza electoral se impuso al partido emergente en los distritos de Costa, Jinámar y Medianías, mientras que la formación morada lo hizo, con poca diferencia en los de Casco, Centro y Cumbre, pero no suficiente para mantenerse como primera fuerza de izquierdas y segunda local.

Ciudadanos, la cuarta formación en discordia, no ha tenido problemas en mantenerse en cuarta posición, con buenos números en cuatro distritos, donde superó con solvencia los 1.000 sufragios. Sus peores resultados los obtuvo en los del Casco y Cumbre, con menos de 400 apoyos electorales.

Coalición Canaria (CC), al igual que le ocurriera en diciembre de 2015, no logró captar las preferencias de los votantes y con un descenso de votos -pasó de los 2.164 hace seis meses a 2028 en junio- y su hundimiento es cada vez más pronunciado en las generales en Telde. En cinco años, en las elecciones del 20 de noviembre de 2011 sus votantes ascendían a 5.724 y desde entonces no ha parado de descender sus apoyos.

El reclamo de Pablo Rodríguez, concejal del Ayuntamiento de Telde, el único diputado grancanario en el Parlamento regional y vecino del municipio, no ha sido suficiente para igualar o superar los resultados logrados Coalición en esa cita electoral de 2011. El descenso de los sufragios -más del 60%- es otro lastre para la formación nacionalista, que estudia estrategias para recuperar su electorado.

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