¿Cuándo empezó a cantar?
Canto desde los tres años, cuando empecé con mi madre en un grupito y, desde ahí, comencé en grupos folclóricos. Así, uno de los más influyentes para mí ha sido la agrupación Entre Amigos, del Valle de Jinámar, en la que sigo actualmente y donde empecé realmente a tocar instrumentos y a conocer el estilo de música canaria. Aunque mis inicios fueron con folclore, con más edad me empecé a interesar por mis propios conciertos.
¿Qué tipo de música le gusta?
La melódica, porque me gustan las canciones que hablan de amor y desamor, ya que me permiten expresar lo que me pasa en cada momento. También compongo y cuando escribo una canción tiene que ser sobre algo que me ha ocurrido, porque si me obligan soy incapaz de escribir nada. Creo que es necesario demostrar los sentimientos a través de una canción para que te conozcan como persona.
¿Su madre también canta?
Sí, se define como parrandera, le gusta la música canaria.
Se puede decir que es herencia. ¿Ha recibido formación?
Estuve, a los cinco años, en La Unión, que era de la escuela de folclore de Telde en Las Huesas, y también en La Unión pero de Vegueta, entre otras agrupaciones y parrandas como Taror, donde estuve un año y medio como director hasta que me tuve que ir a trabajar a Madrid. También he hecho colaboraciones con grupos de otro estilo.
¿Qué hizo en Madrid?
Estuve como cantante principal en una orquesta de seis personas en una sala en el mismo centro, en la Plaza de Ópera junto al Teatro Real. Trabajaba todas las tardes de lunes a lunes, cuatro horas cantando, y fue una experiencia muy buena.
Además de dedicarse a la música, ¿estudia?
He terminado mis estudios. Hice un ciclo de Administración y Dirección de Empresas en el IES Lomo La Herradura, mi barrio. Este es mi lugar sin duda, estuve nueve meses en Madrid y me di cuenta de que la tierra tira mucho.
¿Le gustaría dedicarse a lo que ha estudiado?
No, lo hice porque, como me dice mi familia, el saber no ocupa lugar y era una rama que se me daba bien, pero no voy a buscar trabajo de eso. Quiero dedicarme cien por cien a la música, porque es lo que he hecho toda mi vida. Recuerdo cuando estudiaba, que me echaban la bronca porque muchas veces no hacía lo que debía para irme a ensayar o este tipo de cosas.
La música es un mundo difícil.
Lo es, pero como toda profesión. En este mundo quizás hay más competencia que en otros porque hasta que no haces algo explosivo no sales a la luz y la gente no te conoce. También hay que tener en cuenta que estamos en Canarias y más aún en Telde, donde no se abren muchas puertas, porque no hay medios para ello. Años atrás toqué varias puertas y me las cerraron directamente, algo que me ha fastidiado mucho, pero por esta ciudad y por las siete Islas hago lo que sea necesario. Es cierto que, en general, abrirse puertas en este arte es muy complicado, porque cada vez hay más cantantes nuevos y la mayoría de veces se mueve por enchufe, pero me preocupo en hacer las cosas bien y, como mi compañero musical y amigo, Salva Santana, me dice: con humildad y personalidad cualquier artista puede llegar alto.
¿Qué le diferencia de otros artistas?
Lo primero y muy sencillo: la humildad. Aún no soy nadie y si llego a serlo, que me gustaría, será lo primero que tenga presente. He hecho conciertos y el año pasado salí en un programa de televisión y cuando me han parado por la calle siempre he atendido a todo el mundo. Conozco a artistas grandes que no se paran y creo que las personas que escuchan tu música son los que te hacen ser de verdad un artista, porque si ellos no compran tu música o no te van a escuchar, ¿que razón tiene de ser que cantes?
¿Qué le hace único sobre un escenario?
Lo mío encima del escenario es la sencillez. Nunca he estudiado música, ni canto, ni ningún instrumento de forma profesional. He aprendido en mi casa con la suerte de que mi madre y mi abuela cantan, mi abuelo fue tocador toda la vida, mi tío está metido en Los Gofiones y he tenido mucha influencia, pero ha sido dentro de mi hogar. Soy un artista de barrio que tengo muy claro a dónde quiero llegar y gracias a Dios no he tenido alteraciones en mi voz, porque dicen que si vas a clases de canto ya no es tu voz sino lo que quieren escuchar de ti. Yo muestro la mía tal cual es, natural y diferente, porque siempre he tenido claro mi estilo propio.
¿Cómo se le ocurrió presentarse al programa 'La Voz'?
Por amigos y familiares que veían el programa, porque yo no lo veía mucho, sólo las audiciones a ciegas a ver a quién cogían. Me decían que tenia buena voz y que me presentara porque iba a llegar lejos, lo hice y aquí estamos a la espera.
¿Es su primera vez?
No, la segunda. La vez anterior llegué a las audiciones a ciegas y me compararon con David Bisbal, un recurso que creo que usaron para dejarme fuera. Pero, igualmente, les estoy agradecido porque me compararon con uno de los artistas más importantes de este país y me dijeron que tengo la voz igual a la suya. Puede ser cierto, porque no es la primera vez que me lo dicen. Aún así, este año iré mostrando realmente quien soy yo y a ver si hay suerte.
¿Qué espera del concurso?
Demostrarle a toda esa gente que me ha apoyado durante estos dos años que no se han equivocado; demostrarme a mí mismo que puedo, porque el año pasado me cogí un berrinche importante y no quise ver mi audición hasta seis meses después, ya que fue desilusión y un palo gordo; y hacer ver a los que el año pasado me lo hicieron pasar mal que se equivocaron.
¿Cree que este año será diferente?
Tengo la sensación de que sí, de que va a ser muy diferente. Espero dar más de una sorpresa y poder ayudar a mi ciudad de Telde con lo que esté a mi alcance, ya sea enseñándola a través de un canal de alcance nacional o como pueda.
Tiene la posibilidad de que grandes en este mundo como Melendi, Manuel Carrasco, Malú y Alejandro Sanz lo escuchen cantar, ¿ya sabe con quién le gustaría concursar en caso de ser elegido en el programa?
Me gusta mucho Alejandro Sanz, porque es uno de los más grandes de este país y de los que más me gustan junto a mi número uno que es David Bisbal y Luis Fonsi que, aunque es de fuera, tiene gran repercusión aquí. Aún así, voy a ir a lo que salga, porque me gusta mucho Carrasco también, pero necesito conseguir que se giren.
¿A dónde le gustaría llegar?
Me gustaría ganar, como a cualquiera que se presenta, pero hay que ser realistas. Llegaré hasta donde pueda mostrando mi voz y mi personalidad, porque este año hay un cambio: un making-of que da comienzo al programa. Ahí no estás cantando sino hablando con la gente y mostrándote como eres. Eso haré yo, mostrar mi forma de ser y, a la hora de cantar, mi voz. Si de ahí sale algo, bienvenido sea.
Este es sólo un paso en su carrera como cantante.
Sí, pero el programa no deja de ser un escaparate muy importante para que me conozcan fuera de las Islas. El camino es muy largo, pero pienso que es una carrera de fondo y no de velocidad, porque con esta última la gente acaba estrellada y no quiero estrellarme, prefiero ir con tranquilidad y que cada paso que dé esté bien dado. Esto es muy delicado y con lo mínimo que hagas mal tu carrera puede terminar. Llevo años cantando, pero esto no ha hecho más que empezar y La Voz es perfecto para darme a conocer, dar las gracias a los que me han apoyado y demostrarme a mí mismo que no me equivoqué a la hora de escoger esta carrera.
¿Ha grabado algún disco?
No he podido por motivos económicos. Soy un artista de calle y de familia humilde, nunca nos ha faltado de nada pero la grabación de un disco asciende a 5.000 euros dependiendo de lo que quieras hacer y ha sido imposible. El programa es también una manera muy buena de que productores musicales me vean y me den una oportunidad, algo que para mí sería maravilloso.
¿Cuántas canciones ha compuesto?
Tengo pocas, porque empecé hace cuatro meses. Hace años hice una a mi padre y otra a mi madre y con esas tengo siete. Desde Madrid vi lo que la UD Las Palmas estaba consiguiendo e hice una al equipo y otra a Valerón por su retirada. Ambas llegaron al Club, tuve la oportunidad de hablar por teléfono con Valerón, que me dio las gracias, y una entrevista personal con Larry Álvarez, uno de los directivos de la UD, algo que fue muy grande para mí, porque soy canarión a muerte, teldense y de La Herradura.
