La primera petición de dimisión de un concejal del grupo de gobierno, Agustín Arencibia, en lo que va de mandato por parte de Más por Telde y la comparecencia de Gregorio Viera para explicar la situación de dos trabajadores municipales que no cobran desde enero de este año convirtieron al pleno ordinario de noviembre en todo menos en eso, ordinario. Y en el camino, el regreso de la luz a los campos de fútbol, canchas deportivas, fuentes y dependencias municipales una vez se acordó en la sesión pagar a Endesa las facturas adeudas este año.

El anuncio de sus dotes agoreros por parte de la alcaldesa, Carmen Hernández, sobre qué votaría la oposición en los reconocimientos de crédito para pagar a Endesa -190.000 euros- y a las cooperativas que limpian los colegios -115.897 euros- hicieron que la sesión de este mes se caldeara con reproches entre gobierno y oposición, murmullos de desaprobación desde el público y la entonación de varios mea culpa con propósito de sincera enmienda en lo sucesivo.

El violeta era el color preponderante ayer en el salón de plenos de las Casas Consistoriales, donde los lazos de ese color lucidos por los asistentes, botellas de agua con esa misma tonalidad y las prendas usadas por Gregorio Viera, Diego Ojeda y Sonsoles Martín evidenciaban el compromiso unánime de la corporación en el rechazo a la violencia contra las mujeres, que celebraba su día internacional.

Sin embargo, aunque sea figuradamente, fue el rojo el que se impuso, un rojo fuerte surgido de los reproches entre ambas bancadas del pleno y algún que otra curiosidad..

Los dos reconocimientos de crédito, sobre todo el de los recibos impagados a Endesa desde mayo a octubre de este año, que se había dado por perdidos el jueves, obligaron a la convocatoria urgente de la Junta de Portavoces, donde la alcaldesa explicó la situación.

Este asunto dejó, además, una de las que puede ser frases más recordadas del mandato, dicha por la alcaldesa: "Endesa está esperando al pleno para reenganchar la luz", que supuso el salto en el orden del día -con enfado del PP que iba a defender una moción- para que se aprobara y diera tiempo para que los operarios iniciaran el enganche.

Las explicaciones sobre el retraso por los concejales de Contratación y Alumbrado chocaron con las dudas y preguntas de la oposición, pero fue el comentario de Hernández sobre su poder para vaticinar lo que votaría la oposición -negativo, auguró- lo que desencadenó las mayores críticas. Un rapapolvo que la regidora asumió y se disculpó.

Pero no impidió que Juan Francisco Artiles, portavoz de Más por Telde, solicitara la dimisión de Agustín Arencibia por la situación generada con los cortes de luz. Por dos veces la reclamó, pero el edil de Alumbrado, aunque reconoció fallos en su gestión, rechazó su cese y contraatacó, sin nombrarlo, que otros se fueron corriendo en alusión a Más por Telde, su exsocio.

Novedosa fue la intervención desde el atril y no desde su asiento de Viera sobre los contratos de dos agentes de Desarrollo Local, donde defendió su buen quehacer.