Los promotores de la urbanización industrial El Goro, la familia Naranjo, asegura que solo les resta abonar 30.000 euros de los flecos pendientes del convenio de recepción de este polígono y no los 300.000 euros que la asociación de empresarios alega que son necesarios para acabar las obras que permitan su recepción por parte del Ayuntamiento de Telde.

El representante de la familia Naranjo asegura que la asociación de los industriales miente cuando asegura que con el final de esas obras podrían constituir el ente de conservación ni tampoco es cierto que el Ayuntamiento dejara prescribir esos trabajos. En su opinión, para no bloquear un acuerdo sobre el polígono después de su construcción hace 40 años, los promotores optaron por asfaltar una parte mínima de la calle Josefina Mayor que quedaba por terminar y rechazaron la instalación de farolas en una calle que no lo era cuando construyeron la urbanización, sino la trasera de las naves.

El portavoz de los promotores argumenta que la Justicia les ha dado la razón, pero que los empresarios, quieren que asuman unos gastos desproporcionados, unos 300.000 euros, por una zona que no les pertenece. Considera, además, que los industriales llevan 40 años utilizando el polígono, mientras que esta familia no tiene ningún interes en esta actividad económica y que deben ser ellos los que asuman los gastos que estimen adecuados para adaptar el polígono a los tiempos actuales.