El olor, muy fuerte y que los denunciantes no aguantaban más, condujo al descubrimiento e incautación de cuatro plantas de marihuana en un tercer piso de un edificio de la calle General Aranda, en Las Huesas. Vecinos del edificio alertaron a la Policía Local del hecho, que incluso había provocado a una residente fuertes dolores de cabeza y vómitos, según pudieron observar varios agentes que se acercaron al lugar para investigar. De hecho, según el informe realizado, la señora se hallaba mareada, con vómitos, en un estado de ansiedad, en el sofá y tapada con una toalla.

Los hechos ocurrieron el pasado 11 de enero y la actuación policial culminó con la incautación de cuatro plantas de marihuana en uno de los pisos. Tuvieron que esperar y vigilar la llegada de los dueños de estas plantas, que cultivaban en un pequeño invernadero móvil en el interior de la vivienda y cuyo olor se expandía a través de la caja de escalera del edificio. A las 21.25 horas llegaron los dos propietarios, después de varias horas de paciente espera policial.

La Policía Local les informó sobre la infracción y contaron con la total predisposición a colaborar de ambos, dos jóvenes quienes señalaron que desconocían las molestias causadas por las plantas y que fuera ilegal su cultivo. Después de permitírseles la entrada al piso, los policias procedieron a la incautación de las cuatro plantas, que fueron trasladadas a las dependencias municipales de San Juan. Allí el olor no pasó desapercibido ni tampoco los comentarios.

Allí se inició el tratamiento de la marihuana, arrancándolas para secarlas, una labor que hasta ayer, dos semanas después, continúa con ese proceso. Una vez se culmine el secado, se remitirán a Sanidad para su verificación.

La situación de los dueños de las cuatro plantas de marihuana es la de imputados no detenidos una vez se trasladó al juzgado el hecho. Según la actual legislación, según indicaron fuentes policiales, se aplicará el articulado del Código Penal por tratarse de un cultivo hallado en el interior. Si fuera a la vista, en un balcón o azotea, por ejemplo, tendrían que enfrentarse a una sanción administrativa establecida en la ley 4/2015 de seguridad ciudadana.

No obstante, las mismas fuentes recalcaron que la colaboración de ambos jóvenes fue absoluta en todo momento, ya que no se negaron a la entrada de los agentes al piso ni se mostraron reacios ante la información dada por los agentes. Éstos, conforme a la legislación, dieron conocimiento de los hechos a la autoridad judicial, que será la que dictamine estos hechos.