Si alguien puede improvisar un pregón ese es, sin duda, Yeray Rodríguez. Cantando punto cubano desde hace años, fue el encargado ayer de dar comienzo al Carnaval de Telde. Con humor siempre presente, tomó el papel de juglar para presentar las carnestolendas como se hacía en antaño, dando a conocer los actos de la fiesta. Así, en un segundo bloque de su pregón, cantó todo aquello que se le pasó por la cabeza en cada instante, siempre con afán de homenajear la música cubana y el vínculo que esta tiene con Canarias, "donde hemos creado nuestros propios ritmos cubanos", señala.

A continuación, en el mismo Parque Urbano de San Juan, la zona se convirtió en una auténtica plaza de La Habana para celebrar Los Indianos. Lejos de polvos blancos, dos orquestas del país de América Latina ambientaron la velada con su música y la gastronomía del lugar hizo el resto. Sin duda, un buen comienzo de este Carnaval cargado de sabor.