La Casa-Museo León y Castillo le rinde homenaje al único editor independiente de las islas, Jorge Alberto Liria, cuyo impacto sobrepasa nuestras fronteras. "Me he dado cuenta del impacto que ha tenido cuando he preparado los libros para traerlos, puesto que aquí no hay ni un 4% de lo que he editado, a lo largo de estos años". Y eso que son más de 50 libros los que se pueden encontrar en las vitrinas de una exposición que puede ser visitada de martes a domingo de 10.00 a 18.00 horas.
Son muchas las obras que han pasado por sus manos para leer, corregir y diseñar. Y muchos los autores con los que se ha reunido. "Es un proceso complejo y del que me encargo personalmente. Además, no es sencillo porque me gusta entablar relaciones con los autores y conocerlos, para tratar y abordar cada libro de una forma personalizada". Lo que lleva implícito un tiempo determinado que tiene que sacar después de terminar su trabajo, puesto que lo tiene como un complemento dentro de su vida.
Los libros son los encargados de fijar conocimientos en la sociedad y ante la falta de editoriales en la Isla en 2004, Jorge Alberto Liria, decidió emprender esta aventura. "Todos los libros dependían de los apoyos institucionales", este fue su punto de partida. "En los inicios Anroart Ediciones tuvo un grandísimo impacto. Recibimos obras de todos los estilos y de muchos sitios, aunque tenemos un compromiso con los autores canarios, no estamos cerrados".
La edición de libros es un proceso que comienza con la recepción de cientos de obras. "Es muy complicado hacer la criba. Porque son muchas y muy buenas, aunque al haber trabajado en un periódico y ser jefe de sección, aprendí a trabajar con grandes cantidades de información y a ser selectivo".
La fórmula del éxito en la selección no existe por lo que es una decisión en la que en ocasiones tiene más peso la parte comercial y en otras la personal. "Depende de cada caso. Hay libros que sé que no van a tener una gran difusión, pero es necesario que la gente tenga la oportunidad de leerlos y reflexionar entre sus páginas".
Es así como en estos 13 años, puso en marcha Beginbook Ediciones, en 2006. Ampliando de esta forma su catálogo editor y las materias que aborda. Pero esto no fue todo. En 2012 creó un nuevo sello editorial, Mercurio Editorial, cuyas oficinas están situadas en Madrid. Un viaje largo y fructífero en el que en algunas ocasiones se ha sentido "solo, porque no hay apoyo. Hay muchos momentos en los que tienes que tomar decisiones, que pueden ser acertadas o no. Pero me da mucha pena que no hayan surgido más editoriales independientes, que son necesarias dentro del mercado".
La época actual está marcada por la mercantilización de los libros y por un sistema cerrado en la que los autores noveles no tienen cabida. "Es muy difícil que las grandes editoriales le publiquen algo a los autores noveles, los que lo consiguen probablemente ya tengan algo editado aunque sea de forma independiente". Hecho al que se une la poca visibilidad que tienen los libros a causa del férreo sistema de rotaciones que tienen las librerías. "Hay libros que apenas están quince días y ya son retirados. De esta forma lo que haces es quitarle visibilidad a los libros y se rompe su vida. En otros ámbitos como la moda, por ejemplo, las rotaciones no son tan grandes como las de los libros y es una pena".
En la sociedad actual se consume sin cuestionar determinados artículos aunque después se pretende que el conocimiento sea gratuito. "Una muestra son las descargas, cuando lo haces de forma ilegal bajas cosas para las que no podrás disponer de tiempo para consumirlas", esta es una forma de quitarle valor a los libros y, por ende, a su cometido.
Los ejemplares sobreviven a sus autores y eso es lo que buscan al fijar sus palabras en las páginas y desnudarse ante sus lectores. "En los años que llevo son muchos los autores que empezaron conmigo y que ya no están, pero siempre perdurarán en nuestro recuerdo y un trocito de ellos está con nosotros".
Los libros acompañan a cada persona una gran parte de su tiempo y de su vida, además se convierten en "la exposición pública de cada uno ante los demás, por lo que acaba formando parte de cada uno de nosotros". La sociedad hace los libros suyos y se ha llegado a un punto en el que "se lee y se escribe más que nunca". Fruto de la evolución de la sociedad y su casi completa alfabetización.
Liria reclama que "una dotación de cada partida de libros este destinada a las bibliotecas", para que los usuarios los tengan accesibles y disponibles, a la par que no se olvide cual es su verdadera función.
Un verdadero homenaje a los libros, a través de Jorge Liria, que debería ser habitual y normal, es lo que acoge la Casa-Museo León y Castillo este mes de julio.
