Los usuarios del centro de mayores de Telde continuarán disfrutando de los bailes que todos los jueves y domingos se celebran en este recinto de Los Llanos, una de sus actividades más populares. El concejal de Servicios Sociales, Diego Ojeda, descartó ayer que las verbenas organizadas dos veces a la semana corran peligro por el impago a los grupos que las amenizan, "ya que el Ayuntamiento sí paga las facturas que se presentan, pero existe un procedimiento que se debe seguir y puede acarrear retrasos en el cobro por los grupos".

Ojeda ve detrás de los avisos sobre la suspensión de los bailes una clara intencionalidad política "porque los usuarios que difunden estos comentarios son muy cercanos a partidos de la oposición, que buscan crear un problema donde no lo hay, pero si esa es su forma de entender la política, la nuestra, no".

El titular de Servicios Sociales indicó que "con la contratación de varios grupos hemos intentando ofrecer más variedad musical a los mayores, porque para este grupo de gobierno con los bailes no solo se pretende la diversión de los mayores, sino también una forma de acabar con la exclusión social".

Asimismo, Diego Ojeda recordó que "hemos conseguido reducir el precio de las actuaciones y traer nuevos grupos, pero si la solución es contratar siempre al mismo o negociar con una productora las actuaciones en los bailes, lo estudiaremos por si esa es la solución para acabar con esta situación".

El concejal apuntó también que "hoy [ayer para el lector] algunos grupos han cobrado lo que se les adeudaba y lo mismo pasará con el resto a medida que el procedimiento de control y fiscalización de las facturas lo permita". La cantidad que se paga por los bailes -el Ayuntamiento asume el de dos jueves al mes, mientras que el resto corre a cargo de una empresa ubicada en las proximidades del centro de mayores-es de 214 euros si los ameniza un trío y de algo más de 150 euros si es un dúo. Estos pagos incluyen el Impuesto General Indirecto de Canarias (IGIC).

Ojeda alegó también que esta actividad, aunque popular entre los mayores es una más de las que se ofrece a los usuarios del centro. Además, recordó que el cierre sufrido el año pasado por las obras del recinto provocó que durante ese periodo no se pudieran realizar las actividades programadas. Por eso, parte de la subvención de los 67.000 euros anuales concedida tuvo que retornar al Gobierno.