Telecinco confirmó este martes su intención de rodar una película para televisión sobre el accidente de Spanair en Barajas, que estará basada "en hechos reales" y centrada "de forma exclusiva en las labores de investigación desarrolladas para esclarecer las causas de la tragedia".

El anuncio de este proyecto de ficción, protagonizado por los actores Carmelo Gómez y Emma Suárez bajo la dirección de Norberto López Amado, ha provocado protestas como la de la azafata de Spanair Sandra Díaz Tallón, quien ha abierto un grupo en Facebook llamado "En contra del rodaje de la película sobre el accidente de Spanair".

Asimismo, fuentes de la Asociación de afectados del vuelo JK5022, cuyo accidente en el aeropuerto de Barajas causó la muerte a 154 personas en agosto de 2008, expresaron a Efe su malestar ante este rodaje anunciado por Telecinco y estudian una respuesta conjunta.

Díaz Tallón escribe en su página de Facebook: "Por lo visto, hay mucha gente deseando sacar partido de la muerte de 154 personas, y del dolor de todos los afectados, entre ellos los propios trabajadores de la compañía, y, sobre todo, los familiares de las víctimas. ¿Se puede tener menos vergüenza?".

Fuentes de Telecinco han explicado a Efe que el rodaje de la serie, que contará con dos capítulos y que aún que no tiene título, "mostrará una historia que podría extrapolarse a cualquier accidente de aviación".

La cadena privada puntualiza que la trama "ofrecerá todos los puntos de vista posibles, sin emitir juicios de valor, con datos de dominio público y con absoluto respeto a la privacidad y dignidad de las víctimas".

Telecinco ofrece "total transparencia" a los familiares de las víctimas del accidente de Spanair, incluida la posibilidad de leer los guiones, y puntualiza que en la miniserie no aparecen personajes reales, aunque sí "situaciones reales".

"Contar también es conmemorar, criticar o explicar los hechos, como tantos otros casos reales que se han escenificado a través de películas o series de televisión", concluye Telecinco.

En el accidente aéreo más grave de España de las dos últimas décadas murieron 148 (19 de ellos niños) de los 164 pasajeros, la mitad residentes en Canarias, y 6 de los 9 tripulantes.