Una estancia de cerca de 400 metros cuadrados distribuidos en una sola planta al borde del mar se conforma como una de las más grande de Europa. El Grupo Anfi acaba de estrenarla en el Grand Imperial Suite, en Gran Canaria. El habitaculo se corresponde con lo que serían cuatro habitaciones estándar unidas.

El proyecto, que es una respuesta a la incesante demanda de este tipo de productos, consiste en una gran reforma en la que prima el espacio y la luminosidad. "La amplitud de esta suite y, por supuesto, su increíble ubicación a pie de playa hacen que estemos ante una oferta única", sostiene la arquitecta Marta López.

El Imperial Suite, que se puede alquilar por mil euros la noche, cuenta con una espectacular terraza dotada de diferentes ambientes: zona de jacuzzi y un área de solárium. Este espacio dispone de una mesa de diez comensales al aire libre y una barra vestida con una cortina de cristal superior que da servicio tanto a interior como al exterior.

"La cocina es uno de los puntos diferenciadores de la suite porque se puede cocinar y comer con unas increíbles vistas al mar", comenta López. Una característica que se repite desde las cuatro habitaciones que conforman el Grand Imperial Suite.

"Hemos confeccionado un espacio que nos demandaban nuestros clientes a los que les ofrecemos una suite de ensueño", sostiene Luis Martínez, director general de la división hotelera y Anfi Tauro Golf. De hecho, otra de las ventajas de esta suite es que cuenta con Internet gratuito y con una velocidad superior a los 30 megas. Además, los huéspedes de este inmueble, valorado en 5 millones de euros, "contarán con un servicio a la carta, lo que refuerza la exclusividad del Grand Imperial Suite", destaca Martínez.

La entrada principal da a un espacio central compuesto por salón-comedor-cocina que es la columna vertebral de un inmueble. A ambos lados de esta área se encuentran los dormitorios (dos a cada lado).

Todas las dependencias quedan unidas por una terraza que discurre a lo largo de las mismas. Otra de las características del Imperial es la posibilidad de dividir una de las estancias y crear una suite independiente dentro del propio inmueble con todas las prestaciones propias de una vivienda. Los dormitorios se han diseñado simplificando al máximo la utilización de tabiques divisorios, consiguiendo así espacios más diáfanos.

Todos los dormitorios disponen de baño independiente y espacio de vestidor y dotados de vistas al mar. De hecho, es factible tomar una ducha mientras se contempla el océano. Respecto al mobiliario se ha escogido una línea minimalista pero cálida y acogedora a la vez. Muebles a medida y exclusivos para darle un toque de distinción a la suite.

De líneas muy rectas, colores neutros y claros acordes con su situación de proximidad al mar. En cuanto a materiales son protagonistas el mármol crema marfil, la madera de vitacola, el vidrio, el porcelánico y el silestone. Se ha utilizado la madera no solo como material constructivo sino también como elemento decorativo. Priman los colores neutros, cálidos y luminosos aunque esta armonía se rompe de manera intermitente con un toque de color negro cambiando el carácter de los espacios.