La lista de la pasión. El ejército de los 19.237 fieles amarillos. De Jorge Sánchez Batista -primer abonado de la campaña 'Vívelo'- a María Yasmina Suárez Trejo. La enfermera se convirtió ayer, a las 19.50 horas, en la última aficionada en cursar la petición de alta del carné para el curso 2015-16 en Primera. El club cierra la mejor campaña de su historia y acarició la barrera mágica de los 20.000 [supera con creces los 15.000 del pasado curso tras la hecatombe del 22-J ante el Córdoba]. Mañana, ya solo se cursarán altas en la sede de Pío XII.
Tras 37 días de agitada actividad, entre trámites de renovación y altas, la Oficina del Abonado de la Grada Curva del Estadio de Gran Canaria cerró ayer sus puertas. María Yasmina explicaba que por motivos de salud y laborables había dejado para el último suspiro el proceso convertirse a la religión amarilla. "He cursado cuatro altas de abonos, todas para familiares. Mi padre, mi marido... Me he dejado ir pero al final ha merecido la pena", detallaba la seguidora, que llegó como un rayo de Valsequillo.
Jonathan Rodríguez, natural del barrio de Escaleritas y trabajador en el sector de mantenimiento, con dos abonos de empresa, fue el antepenúltimo en cursar la petición. Dos altas para una firma de Fuerteventura, que dejaron en las arcas del club amarillo una cifra en torno a los 960 euros. El penúltimo fue un empleado de banca, José Francisco Romero Ramírez -abonado número 21.459- para la Grada Sur y en el sector A-22. Acudió junto a su padre, José Romero Medina -abono número 21.460- y también en la Grada Sur. "Los últimos serán los primeros. Nos ha costado tomar la decisión de sumarnos a esta gran familia. Lo hemos valorado hasta el último segundo, y por fin, he logrado convencer a mi padre. Ya somos amarillos, de los de verdad, y queremos que llegue el primer encuentro en el Gran Canaria ante el Levante UD cuanto antes -el estreno en la liga de las estrellas ante su afición, el próximo 30 de agosto en la fortaleza de Siete Palmas-.
De la polémica al respaldo
A tres semanas del inicio de la competición ante el Atlético en el Calderón -22 de agosto-, el club isleño da por finalizada la campaña de abonos, que arrancó el pasado 26 de junio con la polémica presentación de los precios -que registraron una subida 50 al 130%-.
A pesar de las críticas, se han batido todos los registros, y la última pasajera María Yasmina Suárez insistía que el veredicto de la grada había sido definitivo. "No se han alcanzado los 20.000 pero estamos más unidos que nunca; el trato recibido ha sido profesional y cercano. Se han dado facilidades de pago y en mi caso representa una liberación. Ya, por fin, soy amarilla".
El próximo 12 de agosto, los abonados podrán 'estrenar' su carné con la vuelta de la final de la Copa Mahou ante el Tenerife en el Gran Canaria. Se ha desatado la fiebre amarilla, el ejército de los 19.237 incondicionales se convierten en el mejor fichaje de una UD galáctica.
Jonathan Rodríguez, el antepenúltimo de la última jornada, abraza la hazaña de la salvación. Suspira por ver agonizar a los gigantes del balón como Messi o Cristiano en el partenón amarillo. "Desde la humildad y la cantera, podemos soñar", la voz de los últimos de la fila en la campaña. Por fin, vieron la luz de la fe. Desde mañana, en la sede del club de Pío XII, se admiten altas hasta alcanzar los 20.000.
