Las obras del nuevo campo de entrenamiento que se construye en Barranco Seco siguen a buen ritmo. La última novedad visible son las tuberías de riego del césped del nuevo terreno de juego. Las zanjas para incrustar el sistema para mantener fresco el césped salen desde una de las esquinas del campo original de Barranco Seco. De ahí bajan hacia el nuevo campo. Además las excavadoras siguen extrayendo tierra de uno de los fondos para dar más espacio a la instalación que viene. LA PROVINCIA