De momento, no ha sido este el inicio deseado para el Rayo Vallecano.
La verdad es que cuando empieza la Liga lo que quieres es comenzar ganando para ir colocándote un poquito más arriba, pero las cosas más allá del partido del Valencia, se nos complicaron muy rápido en Vigo y contra el Deportivo no salieron como pensábamos. Esto acaba de empezar y queda mucho tiempo para que acabe la competición. Eso sí, lo primero es ganar el próximo domingo en Las Palmas.
El inicio deseado seguro que no lo es, pero ¿el esperado?
Un equipo como el Rayo siempre se encuentra con dificultades. Al final somos mucha gente nueva, con compañeros que han llegado la última semana y eso siempre requiere un periodo especial de adaptación. Para nada son excusas, ni mucho menos, porque el partido contra el Deportivo teníamos que haberlo sacado y ganado de otra forma. Sólo nos queda seguir trabajando y mejorando cosas porque esto acaba de empezar y lógicamente queremos hacerlo cuanto antes.
En los últimos años se ha lanzado encarada ya la competición. ¿Cree que esa dinámica se repetirá esta temporada?
Esperemos. Si fuera por mí, me gustaría que esa racha empezase ya. Pero es cierto que cuando entramos en esa dinámica somos peligrosos porque podemos encadenar buenos partidos ganando. Aunque también digo que partidos como los del Celta o el del Depor nos vienen muchos al año, así que tampoco nos hacen tanto daño e intentamos aprender y mejorar. Seguro que con el paso de los partidos nos irá mejor.
¿Cómo afronta su equipo el partido de esta semana ante la UD Las Palmas?
Sabiendo que es un rival difícil que cada vez está yendo a mejor. El otro día hizo uno de sus mejores partidos y se vio todo el choque con uno menos. Será un partido complicado, pero nosotros tenemos que mejorar, que dar nuestro máximo nivel, aportar un poco más... Estoy convencido de que si es así podemos conseguir los tres puntos.
¿Qué destaca de esta UD?
Me parece que es un equipo versátil, que puede tener varios sistemas en mente, con gente rápida en las bandas y dos hombres que se asocian muy bien como Viera y Araujo, que es un buen delantero. Además atrás van cada vez mejor. Creo que irán a más a lo largo del campeonato. Es un equipo complicado y difícil.
Ni UD Las Palmas ni Rayo Vallecano saben aún lo que es ganar en esta Liga. ¿Cambia eso las formas de encarar el partido?
No, para nada. Nuestra idea va a seguir siendo la misma más allá de que los resultados no han sido los esperados en estas tres primeras jornadas. Al final nuestra idea no cambia más allá del resultado que obtengamos.
¿Es tan innegociable ese estilo? ¿Cómo es capaz Paco Jémez de conseguir que la plantilla nunca dude de la idea de juego que tiene él para el equipo?
Porque se ha visto que es nuestra mejor opción. Llevamos 5 años seguidos en Primera haciendo este fútbol que es lo que nos ha llevado a conseguir lo que hemos logrado, a ser elogiados, y aunque no me guste esta palabra, a ser un ejemplo de lo que es el buen fútbol. Además somos un equipo pequeño y creo que eso es un plus añadido. Respetamos todas las formas de ganar partidos, pero estamos convencidos de que la nuestra es la mejor para nosotros.
¿Cómo siente a su técnico Paco Jémez?
Bien, logicamente trabajando e intentando mejorar cosas. Aunque es el inicio, hay mucha gente nueva y hay que meterlos en la dinámica. Pero, sobre todo, veo a Paco Jémez muy convencido. El míster más allá de los momentos buenos, tiene el poder de convicción en los malos momentos y nos muestra que esta idea es la adecuada para nuestro equipo.
En la última rueda de prensa estuvo comedido para lo que suele ser Jémez. Ha reconocido que estimula muchas veces al jugador delante de los micrófonos. ¿Sienten eso? ¿Les llega así?
Sí, porque al final las cosas que dice en sala de prensa nos la dice antes a nosotros. Forma parte de su forma de ser y el jugador debe ser inteligente. Si no lo es, ahí estamos los que llevamos más tiempo con él para enfocarlo y que no se salgan del camino. Las cosas las dice por el bien del equipo, más allá de cómo es él, con su fuerte carácter y sinceridad. Siempre busca el bien del equipo y eso nadie lo duda.
¿Cómo se siente a unos días de encarar su vuelta a Gran Canaria?
Siempre es especial. Me alegro de que esta vez sea en Primera División. Para mí fue un motivo de satisfacción y de orgullo que la UD volviera a estar en Primera después de tanto tiempo. Y por supuesto que es un orgullo y un placer volver a Gran Canaria porque guardo un cariño especial, como sé que mucha gente me lo tiene a mí. Estoy muy contento por volver. Tengo mucha relación con gente de la Isla. Le deseo lo mejor a la UD y a la gente de Gran Canaria, pero sobre todo a partir de la semana que viene [risas].
Con el paso de los años, ¿cómo valora su paso por la Isla?
Bien, guardo el cariño de esas dos temporadas. En Las Palmas viví algunos de mis mejores momentos de carrera y de vida. En Gran Canaria nació mi hija mayor, sus padrinos son de ahí y me une un gran vínculo con la Isla. Siempre lo tengo presente.
En ese momento estaba en el paro y apareció la UD. ¿Comprende su carrera sin esos dos cursos en Gran Canaria?
No, no entiendo mi carrera sin la UD. Es un lugar muy importante en mi carrera. Estaba en una situación delicada, sin equipo y la UD apostó por mí y yo por la UD. La verdad es que la jugada salió bien para ellos y bien para mí. Profesionalmente me dio la oportunidad de poder demostrar lo que llevaba dentro.
Este domingo coincidirá con Paco Herrera, su técnico en la etapa del Celta de Vigo. ¿Lo ve capacitado para sostener al equipo en Primera?
Sí claro. Me parece un excelentísimo entrenador y una bella persona. Creo que está perfectamente capacitado. Merece todo el crédito del mundo al devolver al equipo a Primera. Ojalá los resultados le acompañen para el próximo año, siempre después de este fin de semana repito [risas].
Otros viejos conocidos por usted han vuelto al club este verano. Son Juanito Rodríguez y Juan Manuel Rodríguez. ¿Qué recuerdo tiene de ellos?
Bueno. Al final uno hace su carrera y su vida y las cosas del pasado ahí quedan. Siempre que me lo encuentro o a cualquier otro le tengo el máximo respeto y aprecio. Sin problema ninguno más allá de lo que pudimos tener en su día que forma parte del negocio del fútbol, porque cada uno mira por lo suyo. No guardo rencor y siempre me gusta saludar a la gente con la que he convivido. Por su parte, Juan Manuel es un grandísimo amigo. Nuestro contacto ha seguido desde que me fui. Le guardo mucho cariño porque es una persona que me dio un empujón y apostó por mí en un momento complicado de mi carrera.
