Disfrazado de mago, sacando un as de corazones de su chistera, Jonathan Viera (26 años) era presentado a lo grande con el Valencia. Escenografía NBA, con un panel enorme con fotos de su rostro e incluso de su paso por la UD. "Vamos a divertirnos", detalló ante los medios. El mediapunta daba el gran salto: del infierno de plata a uno de los grandes de la Liga. Un cuento de hadas. La operación de 2,5 millones, dejaba al isleño como el primer refuerzo de la 2012-13. Luego llegarían Cissokho, Joao Pereira, Guardado -que luego sería amigo íntimo de Viera-, Gago y Nelson Váldez. El entrenador argentino Mauricio Pellegrino también se estrenaba en el proyecto. Solo duró 14 jornadas de Liga, cinco partidos de Champions y dos de Copa.
La plaza de la Constitución de Alboraia albergó la presentación de Viera -6 de julio-, en un acto que contó con la presencia del presidente 'che' Manuel Llorente y el director deportivo en aquella época Braulio Vázquez -el gran valedor de la contratación-. "Intenta cosas que otros jugadores no imaginan y tiene capacidad para que no le pueda la presión. Nunca dudo en venir cuando le propusimos el fichaje. Irá poco a poco y demostrará sus cualidades", indicó Vázquez.
Los medios se rendían a la capacidad barroca de un irreverente jugador de 22 años, sensación en Segunda con 29 duelos ligueros en la 2011-12, dirigido por Juan Manuel Rodríguez. Logró 9 dianas y alcanzó la condición de internacional sub 21 con Luis Milla.
Se estrenó en Primera en el Camp Nou ante el Barça de Messi y el fallecido Vilanova (2 de septiembre del 2012) en la tercera jornada. Disputó los últimos 15 minutos, al pisar el césped por Albelda -uno de los últimos mitos del valencianismo-. En la siguiente jornada (4ª), ya fue titular ante el Celta, en su primer partido en Mestalla. En ese septiembre mágico, en el Allianz Arena se estrenaba en la Liga de Campeones ante el Bayern de Múnich al disputar 19 minutos en el traspiés por (2-1).
Ante Robben e Ibrahimovic
El gigante teutón, con Heynckes, Neuer, Lahm Ribery, Robben y Kroos terminaría la temporada como campeón de la Champions. Viera completó su participación en la cita continental ante el Lille (7') -fase de grupos- y en la ida de los cuartos de final ante el PSG (6').
En el primer curso completó 25 encuentros entre Liga (17), Champions (3) y Copa (5). El despido de Pellegrino -jornada 14- lastró las opciones de Viera, que acabó con 1.103 minutos. En la siguiente campaña, ya con Djukic, solo jugó la primera jornada ante el Málaga (78') y fue cedido al Rayo de Jémez -el que le hizo debutar en la UD-.
Ante los malacitanos, completó el último episodio en Mestalla (17 de agosto del 2013). Dos años y tres meses después, Viera regresa como el estandarte ofensivo de la UD. Un escudo que catapultó a Primera tras una actuación portentosa. Su salida por la puerta falsa de Mestalla y la depresión en el Standard, ya es pasado. El mago, con su chistera, vuelve sin rencor al teatro donde no le dejaron triunfar.
