Talento y músculo para la galaxia amarilla. La vuelta de los purasangre. El zaguero Pedro Bigas y el lateral Ángel López, lesionados de gravedad en la rodilla, se incorporaron ayer a la dinámica del grupo de Quique Setién. El balear se lesionó ante la Real Sociedad, el pasado 3 de diciembre, y con un esguince en su rodilla y el regreso estaba previsto para mediados de febrero. Su recuperación ha sido milagrosa y ayer ya trabajó con los compañeros y tocó balón. Su alta está prevista para visitar al Rayo el próximo 6 de febrero.

Bigas ha sido el gran fichaje de la dirección deportiva. Llegó el pasado julio y fue la sensación en el inicio liguero de la UD ante los ogros de Primera. Con 1170' en las primeras 13 jornadas -todos los minutos posibles-, su lesión en el torneo del 'ko' ante la Real fue un mazazo. Un puñal directo al corazón.

Ya en la fase final de su recuperación, aquí llega un rostro de lujo para taponar agujeros en la retaguardia en la segunda vuelta. Bigas renace de sus cenizas. Vuelve el mariscal bermellón para la muralla.

De forma paralela, Ángel López, inédito en este curso, ha padecido un calvario. Se lesionó en julio, en el Campo de Golf de Maspalomas, en el inicio de la pretemporada. Tuvo que pasar por el quirófano y el alta estaba prevista para diciembre. Una complicación, retrasó el retorno para febrero. Ayer, tocó balón y presentó sus credenciales de raza.

Alcaraz también vuelve a la dinámica del plantel. Se perfila suplente ante el Atlético. Lesionado ante el Barça, tras encadenar 104 días de baja, regresó en Copa en Ipurúa pero recayó por tercera vez. Ante la baja por sanción de Simón ante los colchoneros, David García, en un gran momento, jugaría de lateral diestro. Aythami Artiles y Garrido ejercerán de marcadores centrales.