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Fin del cuento. La UD Las Palmas le dice adiós a una Copa del Rey que esta temporada le dio más sonrisas que lágrimas, también en el día de la eliminación, cuando cayó con la cabeza alta ante un Valencia que se puso serio (0-1). Soñó el equipo amarillo con unas semifinales de Copa, casi nada, hasta que el rival le dejó. Porque el conjunto de Gary Neville se aferró a la única bala que le queda para aprobar esta temporada.

Pese a la superioridad valenciana por primera vez tras 180 minutos, la UD se rebeló, hizo un sobreesfuerzo más y rozó la prórroga en una segunda mitad en la que se entregó. No fue el partido más aseado de los amarillos, anulados en la primera parte por el orden y la presión de los visitantes, pero despertaron en una segunda mitad en la que tiraron de carácter, hicieron circular mejor la pelota y merecieron un empate que hubiera llevado la eliminatoria a la prórroga.

El gol de Rodrigo tras una pérdida de Culio a los veinte minutos y el despertar del Valencia hacía prever una resolución más tempranera pese al 1-1 de la ida. Estaba mejor plantado el conjunto de Neville, que salió con el once de gala. No le quedaba otra. Y los amarillos mostraban su versión más descafeinada. Con Jonathan Viera, con Tana, con Roque, con Willian. Con todo el arsenal de la Liga, pero sin claridad, sin veneno. Estaba superado el cuadro insular, que resistía la presión del equipo de Negredo, Parejo, André Gomes y compañía, que por fin pareció descifrar el juego de Las Palmas.

Aun así tuvo fe el conjunto de Quique Setién, reacio a irse por la puerta de atrás de la Copa del Rey. Eran ya los cuartos de final, pero una despedida mostrando la imagen de la primera parte, casi de desgana, de conformismo, hubiera dejado un poso de insatisfacción. Todo cambió en la segunda, cuando la UD empujó al Valencia hacia su área, incordió a Ryan con varios tiros lejanos y hasta con un cabezazo de Aythami en el descuento en boca de gol. Allí, a unos metros de la portería contraria, al borde de las semifinales, murieron los insulares, que además minimizaron los contragolpes del Valencia, lección mejorada tras el desastre del lunes.

Sin Wakaso ni Valerón

Había pinchado en hueso la UD de inicio. Gary Neville sacó a lo mejor que tenía, incluyendo algún jugador recién recuperado o forzado para la causa como Barragán o Enzo Pérez, y el Valencia demostró más músculo y más intensidad. Se le iba la vida al conjunto ché en este partido y esa fue unas de las diferencias. Setién salió sin Wakaso ni Valerón en el once, fijos en la Copa que habían jugado el lunes en Liga. Tampoco Araujo, en la grada por unas molestias en el tobillo. Así, con Nauzet también fuera de la convocatoria y El Zhar tocado, el técnico cántabro recurrió por primera vez en la Copa a Jonathan Viera y Tana. Repitieron también Roque, Aythami, David García y Willian José forzó en ataque.

La presencia del brasileño es uno de los factores que más está condicionando el juego de la UD en los últimos encuentros. Los defensas amarillos arriesgan menos en la salida de balón por la tendencia de Willian a ganar duelos individuales. Y entre eso, la presión organizada del Valencia y el resultado a favor se entregó la UD al juego directo. Así, Parejo, André Gomes y Enzo Pérez se adueñaron del cuero y del centro del campo.

Por el lado de Gayá y Piatti, a pesar de la intensidad que ponía Nili y las ayudas de Momo, llegaron varios centros al área, como el que mandó Negredo al lateral de la red para poner sobre aviso a Raúl. Le decía el Valencia a la UD que esto no iba a ser como Mestalla y en una pérdida de Culio en zona de peligro, un clásico esta temporada del argentino, se adelantó el Valencia. Corrió André Gomes por la derecha, dejó a Garrido en el camino y su centro lo embocó totalmente solo Rodrigo.

Por entonces la UD había contado alguna aventura en el área de Ryan pero todas quedaron en poca cosa, como un par de diagonales de Momo y algún desmarque de Willian. Inquietaba solo la UD en algún arrebato individual, casi nunca consecuencia de sacar el balón desde atrás. Así, hasta el descanso Ryan solo sintió peligro en faltas laterales, primero en un cabezazo de David García y luego en otro de Aythami que dio en la mano de Abdennour. El árbitro, que contentó más al grande que al pequeño, no pitó penalti.

Se descentró el equipo amarillo entre el colegiado y los innecesarios pitos a Culio, poco a poco apagados por los aplausos a un jugador que está a años luz del de la temporada pasada pero que siempre se deja el alma. Mientras, el Valencia seguía a lo suyo, que era ser superior. Tanto que al borde del descanso pudo hacer el segundo en tres ocasiones: un remate de Negredo con Raúl descolocado que abortó Nili, una falta que lanzó Parejo a la que contestó Raúl con un paradón y un cabezazo de Mustafi.

En la segunda mitad, en la que Montoro debutó jugando los últimos diez minutos, cambió todo. Tuvo más mordiente una UD que encontró a Roque, a un Culio que se desquitó y, por ende, al resto del ataque. Entonces sí el equipo amarillo fue capaz de hacer fluir la pelota y, aunque no provocó una lluvia de ocasiones, sí que mereció el gol.

Lo rozó sobre todo en una volea de Momo tras un gran centro de Culio, en un latigazo de Viera de falta y, ya sobre la bocina, en un cabezazo de Aythami Artiles desviado. Tanta fe tuvo la UD que en los últimos treinta minutos el Valencia no tiró. Murió el equipo amarillo con el central en área contraria y las botas puestas.

- Ficha técnica:

0. UD Las Palmas: Raúl Lizoain; Nili, David García, Aythami, Garrido (Dani Castellano, min. 62); Roque (Montoro, min. 82), Culio; Momo (Wakaso, min. 78), Tana, Jonathan Viera; y Willian José.

1. Valencia CF: Ryan; Barragán, Mustafi, Abdennour, Gayà; Enzo Pérez (Danilo, min. 72), Parejo; Rodrigo, André Gomes, Piatti (Feghouli, min. 63); y Negredo.

Gol: 0-1, min. 20: Rodrigo.

Árbitro: David Fernández Borbalán (Comité Andaluz). Mostró tarjeta amarilla a los jugadores locales Jonathan Viera (min. 40), Roque (min. 44), Culio -una vez concluida la primera parte, por protestar- y Aythami (min. 53), así como a los visitantes Piatti (min. 34), Barragán (min. 39), André Gomes (min. 71), Rodrigo (min. 87) y Mustafi (min. 89).

Incidencias: partido de vuelta de cuartos de final de la Copa del Rey disputado hoy en el Estadio de Gran Canaria ante 18.206 espectadores. El Valencia se clasifica para semifinales por un resultado global de 2-1. Antes del encuentro el capitán local David García fue homenajeado con una camiseta conmemorativa de sus 400 partidos oficiales con Las Palmas, cumplidos el pasado lunes ante el Levante.