Como Don Quijote frente a los molinos. Así, como si se metiera en la piel del Ingenioso Hidalgo que se encara a una cuadrilla de gigantes que solo asoman en su imaginación, la Unión Deportiva Las Palmas reta hoy en el Estadio de Gran Canaria -a partir de las 19.30 horas (Canal+Liga/El Partidazo)- a la galaxia que forma un Real Madrid plagado de estrellas mundiales. El desafío, mayúsculo, llega en el momento más dulce de la temporada para el equipo que entrena Quique Setién: después de hilvanar tres victorias consecutivas -contra SD Eibar, Getafe CF y Villarreal CF-. Para la cita ante un rival casi sin opciones de ganar la Liga -suma 15 puntos menos que el Barça- y que apura su última bala en la Liga de Campeones se cae Tana, que no ha podido recuperarse de una contusión en el gemelo de la pierna izquierda.

En su primera comparecencia en el Estadio de Gran Canaria después de toda una vida de visitas al Insular -la primera, en septiembre de 1951; la última, en octubre de 2001-, el Real Madrid se presenta con varias ausencias significativas. Zinedine Zidane -antes galáctico, ahora entrenador blanco-, que no podrá contar con Karim Benzema -sigue con su proceso de recuperación para dejar atrás una rotura en el bíceps femoral derecho-, optó ayer por dar descanso a Danilo, Toni Kroos -que durante la semana sufrió un proceso gripal- y James Rodríguez.

A un mundo de distancia del Barça en la carrera por el título de Liga -con el Atlético clavado en medio de ambos- y fuera de circulación en la Copa del Rey por un error monumental -la alineación indebida de Denis Cheryshev contra el Cádiz CF-, el Real Madrid lo apuesta todo a un solo número: la Liga de Campeones. Con ese panorama, la primera incógnita a resolver en el duelo de hoy es la actitud del equipo blanco ante un compromiso de un torneo en el que ha optado por dejarse ir.

Después de firmar tres triunfos seguidos -ante Levante UD, RC Celta y AS Roma- tras caer en el Bernabéu con el Atlético en el derbi de la capital, a Zidane le toca recomponer su once tras elegir la vía de las rotaciones para regular el depósito de gasolina de su plantilla de aquí hasta el final de campaña. Con Keylor Navas en plan intocable en la portería, la defensa merengue podría estar formada por Carvajal, Sergio Ramos o Pepe, Varane y Marcelo.

Variantes en la medular

Las dudas en la alineación del conjunto de Chamartín se concentran en la medular. Allí, en la zona ancha, el técnico galo maneja dos alternativas: podría juntar a Modric y Casemiro en el doble pivote para formar con tres posibles mediapuntas -Jesé, Isco y Bale- o plantar tres mediocentros -Casemiro, Kovacic y Modric- y dos extremos -Lucas Vázquez y Bale-.

Donde no hay lugar para la sospecha en el equipo titular del Real Madrid es en el puesto de delantero. Allí, como faro y guía de la galaxia blanca, sobresale la figura de Cristiano Ronaldo. El futbolista de Madeira lo ha jugado todo: las 28 jornadas de Liga con sus 2.520 minutos. Lejos de la gloria colectiva, el Pichichi aparece en el horizonte como uno de los retos personales del jugador portugués. Con 27 dianas, una más que Luis Suárez -que ayer no jugó con el Barça-, CR7 ya apunta hacia la portería de Javi Varias -al que ha batido en once ocasiones- para ampliar la ventaja en la lista de goleadores.'

Feliz, hasta con cierto desahogo clasificatorio -tiene la zona de descenso a cuatro puntos de diferencia-, la Unión Deportiva espera a un adversario que suele pinchar tras el partido europeo de turno en su punto culminante del año. Con 30 puntos en la mochila, el equipo de Setién ve de lejos a la amenaza del descenso. Y ahí, en la zona de confort, ha ofrecido su mejor rendimiento: a la cita, con cerca de 25.000 entradas vendidas, se presenta tras asaltar el pasado fin de semana El Madrigal y hacer descarrilar al Villarreal CF en su particular persecución sobre el Real Madrid.

Con Tana de baja, en las filas de Las Palmas toca despejar la incógnita de la ecuación: cómo recompondrá Setién el centro del campo. Con Roque Mesa de vuelta tras cumplir un partido de sanción, la lógica apunta a un triángulo formado por Montoro, el propio Roque y Jonathan Viera, con Nili y Momo dispuestos como extremos. En la defensa, David García, Aythami, Bigas y Garrido formarán la línea de cuatro y Willian José seguirá como delantero centro.