La Real Sociedad, que hoy comenzará a preparar el partido ante la Unión Deportiva Las Palmas, confirmó frente al Celta su escaso poder de reacción, que le ha impedido ganar a sus adversarios cada que vez que toman ventaja.

Los donostiarras son el peor equipo de la Primera División en este aspecto y hasta ahora en las 29 jornadas de liga disputadas, cada vez que su rival se ha adelantado en el marcador como mucho ha conseguido un empate.

Por ese motivo cuando Iago Aspas logró el 1-0 el pasado sábado en el inicio del choque, resultado que a la postre sería definitivo, muchos aficionados ya descartaban la posibilidad de voltear el marcador vistos los antecedentes.

Sólo en cuatro ocasiones la Real ha exhibido poder de reacción, aunque insuficiente, porque en todas ellas no pasó del empate.

El Getafe, en la primera vuelta, comenzó ganando con un gol de Sarabia en los primeros minutos y la reacción vasca se quedó a medias, con una igualada a uno, algo que también le sucedió en la visita a Vallecas cuando el Rayo se adelantó en dos ocasiones y la Real pudo empatar el partido.

La misma circunstancia ocurrió también en Anoeta ante el Deportivo, con un 0-1 de Luis Alberto equilibrado por el tanto de Xabi Prieto, y ante el Málaga con un empate de un renqueante Imanol Agirretxe en el final del encuentro cuando la Real perdía ante el conjunto andaluz.

En ningún caso, por tanto, una ventaja rival ha desembocado al final de los 90 minutos en una vuelta al marcador a favor del conjunto txuri urdin, algo en lo que el técnico donostiarra, Eusebio Sacristán, se verá obligado a reflexionar para los nueve últimos encuentros de la temporada, en la que se repartirán unas notas que a día de hoy no pasan del suficiente raspado.