Valerón, la eternidad del genio. La UD ofrece un año más al artista barroco inmortal, cuyo contrato finaliza el próximo 30 de junio. A sus 40 años, y que serán 41 el próximo 17 de junio, será ahora el el mediapunta el que tome una decisión cuando termine este curso con aroma a salvación. En la semana más especial del curso, cuando rinde visita al Deportivo [club en el que militó durante 13 temporadas], el corazón del mito late con fuerza. Vuelve a Riazor, el teatro de los sueños del '21'.
Como guías espirituales y catedráticos en la ciencia Valerón, Javier Irureta, Sergio González, Molina y Capdevila -que coincidieron con el grancanario en el Dépor- aportan las claves de la carrera de una figura irrepetible. Es un viaje por el territorio de la fantasía, donde los milagros se hacen realidad. Un paraíso sin fronteras. Aquí está la travesía.
El regreso de la leyenda a su jardín. Juan Carlos Valerón (Arguineguín, 40 años) afronta este domingo su primera visita a Riazor como jugador de Primera tras dejar la entidad gallega en junio del 2013.
Javier Irureta, que llevó las riendas del Dépor durante siete campañas, coincidió durante cinco cursos con el genio de Arguineguín -la edad dorada del '21', que se coronó con dos Supercopas de España y una Copa del Rey-.
El preparador vasco, ya retirado, disecciona los episodios más benditos del Flaco, que completó 422 duelos con el club gallego [182 con la mano de Irureta en la banda].
Z Múnich, Madrid y el Milán
Irureta resalta la visión de juego del Mago. "Valerón tiene una trayectoria larga, tuve la oportunidad de dirigirlo 5 campañas -2000 a 2005. Fue un jugador de características especiales; garantizaba el espectáculo. Muy acorde con las premisas estéticas de ahora. Sabía leer muy bien el juego; contaba con una visión privilegiada, todo lo hacía al primer toque. No era preciso contar con un físico poderoso para enamorar como lo hacía él. Estaba todo en la cabeza (...) En el Dépor marcó una época y lo considero irrepetible", explica el estratega, que ganó una Liga para el club deportivista (1999-00, el Súper Dépor y un curso antes del aterrizaje del Flaco).
Elegante, preciso, discreto y silencioso. Irureta ensalza la labor de grupo del marqués de caviar. Un poeta único, que relegó a la suplencia a Djalminha. "Fue único en su posición, siempre en el ataque, en el que destacaba por su generosidad. Y luego era una buenísima persona, siempre aportaba; esos elementos valorados y catalogados como invisibles. Lucía un cerebro portentoso, y eso que tuvo que pasar por varias lesiones de extrema gravedad [tres operaciones de rodilla] (...) Ha protagonizado una revolución, fue un adelantado de su época".
Y desvela que lo ve capacitado par ser protagonista con Setién: "Riazor y el Dépor le deben mucho. A sus 40 años, ya está cerca del final, y aunque no juegue, estoy seguro de que sigue aportando en el vestuario de Setién. Su etapa en la UD es destacada, sobre todo por la arista emocional. La propuesta de la UD de Setién se asimila mucho a la concepción del juego de Valerón; son como dos almas gemelas".
Pagaría por estar en Riazor. ¿Cómo reaccionará el templo? Aplausos, pañuelos y lluvia de flashes. "A Valerón se le recibirá como merece: aplausos y pañuelos. Es y será uno de los jugadores más queridos".
Múnich, Londres o Madrid. A la hora de decantarse por un fotograma del '21', se decanta por el histórico triunfo en el Olímpico de Múnich ante el Bayern. La primera victoria de un equipo español en la mítica fortaleza bávara. 34 años después, Valerón tumbó el maleficio.
"Ha protagonizado muchísimos, quedarme con alguno es una injusticia clamorosa. La primera victoria de un equipo española en el Olímpico de Múnich -el Dépor se impuso 2-3 en Copa de Europa, el 18 de septiembre del 2002- fue mágico. Makaay firmó los tres goles del cuadro alemán; luego sería traspasado al club bávaro por 20 millones de euros. Valerón le dio los tres pases (...) Tampoco conviene olvidar el histórico 4-0 ante el Milán en Riazor. Una remontada con mayúsculas, al más puro estilo Valerón".
En ese festival, Valerón se retiró ovacionado en el 90 y dejó su puesto a Djalminha, que se suponía que le quitaría el puesto al Flaco.
Z Reflexión ante el drama
José Francisco Molina coincidió con Valerón en dos etapas [6 años en el Deportivo y dos en el Atlético de Madrid]. El exportero internacional eleva a los altares al 'Flaco'. "Ha sido uno de los grandes jugadores del Dépor, en toda su historia. En sus trece campañas, ha dejado una lista kilométrica de recuerdos y grandes actuaciones. Riazor le recibirá como merece; se le reconocerá su pasado. Sabe interpretar y leer el fútbol como nadie. En la toma de decisiones, en el último pase, había pocos como él en el césped".
Molina descendió con Valerón en una etapa negra en el Atlético. Y recuerda su calma ante el pánico. "Calidad humana es digna de elogio; por encima de buen jugador, era un caballero. Hablo en pasado, pero aún sigue en activo. Y seguirá dando alegrías para la UD. En el Dépor, estuvo a un nivel brutal. Está entre los mejores en la historia del club gallego. En el vestuario siempre te ayudaba. Amigo y confidente para siempre", finaliza.
Z Un campeón del mundo
Joan Capdevila (247 partidos con el Dépor) se recupera del cruzado y ha dejado a los 38 años la práctica profesional del fútbol. Coincidió con Valerón durante 8 campañas -siete en el Riazor y la del descenso con el Atlético-. Internacional en 60 ocasiones, el lateral catalán, que también coincidió con Ángel López en el Villarreal, puede presumir de gloria con la Roja: ha ganado un Mundial (2010) y una Eurocopa (2008) -junto a David Silva-.
"Djalminha era como Messi en el Barça, vino Valerón y lo sentó. Está en la memoria de todos y espero que tenga unos minutos en Riazor ante el Dépor. Sería un gran premio; un reconocimiento. El técnico de la UD Setién está apostando por otro juego y le está saliendo bien. Podía haber estado y hubiese brillado en la España de los jugones, de eso estoy convencido. Jugadores como Valerón encajan a la perfección en cualquier equipo". Y subraya la mágica remontada ante el Milán, que puso al Dépor en las semifinales de la Liga de Campeones.
"Fue increíble, así como ganar la Copa del Rey en el Centenariazo. Nos merecíamos haber ganado esa Liga de Campeones. El Dépor logró jugar 5 años consecutivos en Copa de Europa. Djalminha solo jugó un rato en el Centenariazo y en la remontada ante el AC Milán, Valerón se había hecho el amo y señor".
Para Capdevila, por encima de los tres títulos conquistados con el cuadro gallego, la esencia pura de Valerón se sigue respirando en el teatro de Riazor. "Marcó un antes y un después; fue la semilla de lo que luego lograría el Barça y la Roja".
Z Un amigo especial
Sergio González, extécnico del Espanyol, y que coincidió con el Flaco en el Dépor, presume de su amistad. "Es de esas personas que te acompañan para siempre; en el césped era una pasada y llegará a convertirse en un gran entrenador".
Con Tristán, conformaba una camaradilla repleta de anécdotas y pasión por el balón en el equipo gallego. "Pagaría por verle, como dijo Iniesta. Valerón es único y poder disfrutarlo es un lujo para todo espectador. Le queda mucho juego en sus botas y cabeza", apostilla.
Testimonios de un renacentista ante la batalla más emotiva. Valerón, que ayer atendió a los medios, analiza su regreso a Riazor. La primera vez que lo hace como jugador de Primera y con la UD.
"Hay que disfrutarlo porque claro que puede ser el último, pasarlo bien de manera normal y natural como siempre hago yo (...) Qué decir lo que representa este partido. Hay dos partes, la que pertenece a nivel personal y la otra que está estrictamente ceñida a la competición. Los dos equipos estamos buscando los puntos que nos faltan para estar más tranquilos. Hasta que no los consigamos no lo estaremos. Queremos terminar bien", añade.
Agradece las respuestas de ánimo de la afición gallega, que le brindará un homenaje en A Coruña la noche del domingo. "Sí, lo voy a disfrutar muchísimo más porque la última vez todo fue muy rápido -en enero del 2014 cuando militaba en Segunda con Lobera y los amarillos vencieron 1-2-. Ahora vamos más tranquilos y relajados. Aquella fue una etapa muy importante en mi vida y quiero disfrutarlo mucho".
Z Fecha de caducidad
Valerón no quiere pronunciarse sobre su continuidad en la UD: "Hay que disfrutar cada momento, porque claro puede ser el último. Pasarlo bien de manera normal y natural, como siempre hago.
Confía en la salvación del club amarillo pero sin confianzas. Con 36 puntos, el objetivo no se ha logrado de forma matemática: "Las sensaciones son muy buenas y probablemente todos los equipos que se enfrenten a nosotros lo vean y lo saben. Lo que no sabemos si eso se va a traducir en que podamos sacar el resultado adelante. Ellos también quieren sacar los tres puntos".
Manuel Pablo, capitán del Dépor, le acompañó en sus 13 campañas. Y reencontrarse con el de Arucas será muy emotivo: "Seguramente, esta semana me empezarán a llamar y a hablar. Tengo ganas de ver a los amigos del club, vivir esa situación de ese partido y de estar allí. Ver a Manuel Pablo también, y estar un rato con él. Tengo muchas ganas ydeseo de viajar y disfrutarlo".
Con el apoyo del vestuario, quiere seguir. "Mi intención es seguir estando en el club y ya se valorará cual será el sitio donde más puedo ayudar. Yo no tengo ningún problema, todo se hablará". Y ve a Viera como su relevo natural: "Jamás he estado con un jugador con ese talento, es un crack". Con solo 10 partidos en Liga y 265 minutos, escapa de la polémica. "Mi función es estar bien". Aterrizará el domingo con el corazón dividido: "Para mí la UD es mi casa, mis comienzos. Vivo unos años increíbles por participar en estos momentos en la historia del club isleño. Pero no puedo olvidar lo importante de A Coruña. No los podría separar, son parte de mi vida. Están en mi corazón". ¿La salvación? No hace cuentas. "Solo entreno y me esfuerzo". La voz de un mito eterno, que tiene su futuro en sus manos. Y una visita a su alma.
