Quique Setién, entrenador de la UD Las Palmas, quiso cerrar "la incertidumbre" acerca de su futuro dejando claro que hasta después del último partido de la temporada no se reunirá con el club para valorar su continuidad, pero que "seguro no habrá problemas". "Mi intención siempre ha sido la de continuar un año más, estoy contento en la Isla por el trato que se me ha dado y por lo que hemos hecho. Soy una persona conciliadora, seguramente me voy a poner de acuerdo en todas las cosas con el club y la dirección deportiva. Todo queda supeditado a que finalice el campeonato, a que nos sentemos a final de temporada, a que haya una reunión y hablemos de muchas cosas", explicó este viernes en rueda de prensa.

"Mi intención no es generar una incertidumbre, pero estoy encantado aquí, no estoy negociando con otros o esperando cualquier cosa. Todo queda supeditado a una conversación con el club después del último partido de liga, pero hasta que termine el campeonato no diré nada sobre mí o sobre el futuro de los jugadores", indicó. "El presidente se ha expresado perfectamente, nadie ahora va a poder retener a nadie si no quiere estar. Si yo me quisiera ir, ¿qué va a hacer el presidente?", comentó tras las declaraciones de este jueves de Miguel Ángel Ramírez. "La cuestión está en que yo no me quiero ir, estoy a gusto aquí. He estado muchos años en Lugo, he renovado año a año y ni he hablado del dinero, era siempre superfluo. Hay que comentar muchas cosas y seguro que no vamos a tener ningún problema para continuar, hay voluntad por ambas partes. No sé por qué se ha generado ese debate. Ahora mismo mi intención es continuar pero tengo que hablar con la dirección deportiva. Creo que no va a haber ningún problema", insistió el técnico.

Sobre el encuentro de este sábado ante el Sporting, contestó que "es lo más importante para todos". "Supongo que el Sporting viene aquí como si fuera una cuestión de casi su última oportunidad. Su situación es complicada como la de otros cuatro o cinco equipos. Va a ser un partido complicado, les conocemos perfectamente. Podemos esperar de ellos su intensidad y su agresividad. Quizás no estén en su mejor momento, pero cada jugador se deja la vida en cada acción. Nosotros estamos en una buena dinámica y trataremos de sacar adelante el partido. Hoy, como ayer, he felicitado a los jugadores por la intensidad que ponen en los entrenamientos, es un orgullo verles entrenar ahora, hay alegría y esto es un impulso enorme a la hora de competir. No hay ninguno que haya bajado los brazos, es una delicia ir a entrenar ahora porque el equipo está francamente bien", continuó.