La Provincia - Diario de Las Palmas

La Provincia - Diario de Las Palmas

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

El análisis táctico

Frenazo al triángulo mágico

La UD perdió fluidez por la presión del Sporting a los faros amarillos en el centro del campo

Roque Mesa, junto a Sanabria. QUIQUE CURBELO

Cuando Quique Setién perdió a Vicente Gómez a finales de enero tuvo que darle una vuelta de tuerca a su plan de juego. El de Schamann era clave en el engranaje de un equipo que no había encontrado su mejor versión pero sí había espabilado y estaba fuera de puestos de descenso. Después de un par de pruebas fallidas ante el Levante y el Rayo Vallecano, el técnico cántabro encontró la fórmula juntando por el medio a Jonathan Viera, Tana y Roque Mesa. Con ellos tres en el corazón del campo, sacrificándose en tareas defensivas -sobre todo el teldense, siempre imperial- y marcando los tiempos de los partidos con el balón en los pies, la UD Las Palmas ha encontrado la excelencia en su juego. No pudieron sorprender en su estreno en el Sánchez Pizjuán y tampoco la semana siguiente en el Estadio de Gran Canaria contra el Barcelona. Pero ante ambos gigantes la UD plantó las semillas del planteamiento que le ha dado la permanencia virtual a cinco jornadas para el final.

Desde entonces el conjunto amarillo siempre ha logrado sentirse cómodo con el balón durante la mayoría del tiempo de cada partido. Hasta ayer. Ya le tocaba. A buen seguro la clasificación tuvo su influencia, pero el Sporting de Gijón puso de su parte. Y mucho. Porque el conjunto de Abelardo le estorbó como no había hecho nadie desde, posiblemente, el Rayo Vallecano de Paco Jémez, allá por el 6 de febrero. Excepto jugadas aisladas el cuadro insular jamás hizo circular con continuidad el balón por campo contrario.

Ni siquiera Real Madrid y Barcelona torpedearon tanto la posesión de los amarillos. El equipo de Abelardo ahogó a Roque Mesa y las líneas de pase entre el triángulo mágico con el trabajo de Omar Mascarell, Sergio Álvarez y Guerrero. La sinfonía amarilla desentonó en un encuentro que la afición quería que se convirtiera en una fiesta. Decepcionados por el guión del duelo, a la grada no le importó que el equipo hubiera cumplido el objetivo con un mes de antelación y perdió la paciencia pitando a los suyos en los últimos minutos.

Hasta 113 pases falló la UD Las Palmas en el encuentro de ayer, y más de la mitad fueron en su propio campo, donde la circulación debe ser más segura. Pero el Sporting fue a la yugular y presionó en todo el campo. No le quedó más remedio al conjunto asturiano después del tanto inicial de Pedro Bigas, pero de todas formas ese parecía el plan que había diseñado Abelardo desde los vestuarios.

Volcados en la izquierda

Si por algo se define el cuadro asturiano desde la llegada del 'Pitu' es por su intensidad. Y ayer lo volvió a demostrar con mucho orden y una agresividad que quedó reflejada en las estadísticas con 21 faltas. En esta racha de victorias a la UD nunca le habían hecho tantas. El último rival que superó la veintena fue el Levante. Ese arma también la empleó el Sporting para incomodar a los amarillos.

El jugador más derribado fue Jonathan Viera, por el que pasaron la mayoría de ataques del conjunto de Setién. El de La Feria volvió al puesto de extremo izquierda ya que Vicente Gómez regresó al once titular. El de Schamann, gigante en los primeros meses del cántabro en el banquillo, se merecía volver a tener una oportunidad y la recibió ayer. Fue la tercera vez desde el Pizjuán que Setién retocaba ese triángulo. Las dos ocasiones anteriores fueron ante Villarreal y Real Madrid por las ausencias por lesión y sanción de Tana y Roque.

Sin embargo se mantuvo el dibujo 4-1-4-1 ya que Vicente Gómez se situó en el puesto de interior izquierda y Roque siguió como único pivote. Vicente y Jonathan Viera hicieron que la UD atacara el 40 por ciento de las ocasiones por la banda izquierda, mientras que solo el 30 por ciento fue por la derecha, donde se movió El Zhar. Pero los amarillos sufrieron ante un Sporting que resistió en el centro del campo y con ello a la UD.

Compartir el artículo

stats