Javi López, capitán del RCD Espanyol, afirmó ayer tras perder por 4-0 ante la UD Las Palmas que no han estado a la altura "de la camiseta" y que ya no vale "pedir perdón", tras la segunda parte de su equipo, en la que encajó tres tantos, resultado que les condena a seguir sufriendo para asegurar la permanencia en la categoría.

"No merecemos llevar esta camiseta, no podemos llevarnos cuatro goles, no puede ser cuando nos estamos jugando el descenso", apuntó el jugador sevillano a los micrófonos de Movistar Plus, a la conclusión del choque en el Estadio de Gran Canaria

El futbolista lamentó haber encajado "el primer gol al final de la primera parte, y el segundo al principio de la segunda", algo que no se pueden "permitir" en plena carrera por eludir el descenso a Segunda División y aunque cree que la permanencia aún es posible, porque el grupo está "unido", ha dicho que "de esta forma" no la conseguirán, "ni mucho menos".

López añadió que ahora tienen "tres finales" por delante, y la primera de ellas "en casa ante el Sevilla", al que tienen que ganar "sí o sí" en Cornellà-El Prat si quieren mantener "a este club histórico en Primera División, porque no podemos permitir que se nos vaya, es nuestro deber y nuestra responsabilidad", así como una "presión añadida" que deben saber llevarla porque son "profesionales".