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UD Las Palmas Nuevo proyecto 2016-17

Sergio Araujo mira al Calcio

El delantero argentino de la UD, que solo logró dos tantos en la segunda vuelta, estudia ofertas de Italia

El delantero Sergio Araujo, ante el Dépor, en el Gran Canaria. QUIQUE CURBELO

Las fronteras de Sergio Araujo. Italia, la tierra de la redención. El héroe del ascenso del 21-J mira al Calcio. En el campeonato italiano, el delantero argentino de 24 años, mantiene su cartel de referente de pólvora. Con seis dianas en la 2015-16 con la UD en Primera, busca salir de la depresión. En la pasada segunda vuelta del campeonato, solo completó tres partidos de titular. Poco a poco, bajo un manto de tinieblas, se ha ido diluyendo su figura de pistolero total. "Manejamos ofertas y hay interés por ficharlo", admiten desde el entorno del '10' amarillo. Y todos los indicios apuntan al Calcio.

Sampdoria, Palermo, que intentó fichar al 'Chino' el pasado verano, y Torino tienen en su libreta al argentino. La ventana perfecta.

El punta alcanzó el sobresaliente en la pasada temporada, la primera en la UD, con 25 tantos. Además, entró en la historia del club grancanario al lograr el definitivo (2-0) ante el Zaragoza que selló el salto de categoría -13 años después de la última presencia en la liga de las estrellas-. Estas cifras de vértigo, obligaron a la UD a ejecutar la opción de comprar y poner fin a la cesión. Se abonó a Boca Juniors la cifra de 2,5 millones de euros. Parecía el negocio del siglo, la operación perfecta.

Ya con el exatacante del club xeneize, Barça B y Club Atlético Tigre, el Palermo se cruzó en el camino de Araujo y lanzó una oferta de 13 millones de euros. Miguel Ángel Ramírez, presidente del club isleño, optó por desechar la oferta del cuadro del sur de Italia. "Es patrimonio de al entidad", repetían los ejecutivos de la UD, que consideraron que la puja solo había comenzado. Héroe para la grada, la impronta intachable del nueve amarillo mutó. Una metamorfosis infernal, que llevó al héroe del 21-J a las catacumbas.

Desconexión y una puerta

Con 30 partidos y 6 goles, el salto de categoría de Sergio Ezequiel Araujo no ha sido fácil. Debutó ante el Atlético de Madrid en el Calderón -22 de agosto- y parecía que su rol de titular indiscutible duraría hasta el fin de los días. En la tercera jornada, ante el Celta de Vigo, aplacó la tempestad. Dos goles y una asistencia. El mejor Araujo había vuelto.

Intocable para Paco Herrera, la destitución del catalán dejó al Chino solo ante el peligro. Setién lo sentó ante el Real Madrid en el Bernabéu -10ª jornada, octubre del 2015- pero de nuevo logró resurgir de sus cenizas. Vio puerta ante el Granada y Real Sociedad. Fin de la primera vuelta pero comenzaron las primeras críticas por su estado físico.

La contratación del entrenador personal Víctor Iglesias fue el inicio de la tormenta perfecta. En el despertar de la segunda vuelta ante el Atlético de Madrid en el Gran Canaria, ya había perdido su plaza de titular en detrimento de Wilian José. El pistolero brasileño le robó la gloria. Comenzaba la caída del ídolo.

La explosión del 'caso Chester', tras el duelo ante el Barça de Messi, el pasado 20 de febrero, estiró la etiqueta de elemento tóxico de Sergio Araujo. Sancionado y expedientado -por la salida nocturna sin permiso-, encadenó dos partidos sin un minuto ante SD Eibar (viajó y se quedó en la grada) y Getafe.

Solo tres partidos de titular, tras el castigo del club, y dos goles ante el Deportivo en Riazor. En las entrañas del estadio gallego, Araujo lanzó un órdago al club. Comenzaba la disputa dialéctica. "Seguiré si mi quieren, eso dependerá del club y del entrenador", determinó. Se había colocado el cartel de transferible. Casi sin querer, y dos meses después de que su padre, Guillermo Araujo, asegurase que tenía ofertas del extranjero (llegó una de China) y que si no jugaba, se marcharía.

Setién, al más puro estilo Setién, respondió al padre del delantero en la previa del Sevilla-UD. "No me someteré a ningún chantaje". Otra mina, otro artefacto en torno a una pieza querida y amada por la grada.

Pero los vítores se convirtieron en pitos. Ante el Madrid y Valencia fue discutido por la grada. El último tanto que logró en el Gran Canaria fue ante el Granada -30 de diciembre-. En toda la segunda vuelta, no vio portería en el escenario que lo elevó a los altares de la fama y la gloria.

En la última jornada, ante el Málaga, se quedó en el banquillo. Un año después de ser el rostro del mayor éxito del siglo en la UD, todo había cambiado. Silencio y silencio.

La receta de Setién

Siempre en el disparadero, tanto el presidente de la UD, Miguel Ángel Ramírez, como el técnico, Quique Setién, consideran a Araujo patrimonio de la entidad. Tanto como el escudo. La inversión de los 2,5 kilos, sigue pesando en el ambiente.

Letal en el área, con un remate prodigioso, la estadísticas avalan al 'killer': 75 partidos, 30 goles, 13 asistencias. El mapa de un nueve especialista en tantos de cine. "Es recuperable, será una de las prioridades", asegura el presidente. Setién prepara el látigo, confía en volver a extraer lo máximo de un futbolista, al que l restan cuatro años más de contrato. Pero Araujo ya mira a Italia. Una salida para la reflexión, tras un curso infernal en la UD. "Hay cosas interesantes; aún nade serio", dicen en su entorno. El Chino quiere volar.

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