Decía Quique Setién a su llegada que el estilo de juego que él propone no es fácil de implantar, que conlleva su tiempo. Y por eso ordenó dobles sesiones en sus primeras semanas en el cargo. Hay futbolistas, transmitía el cántabro, a los que les cuesta incluso un año encajar en sus planteamientos porque llevan tanto tiempo jugando a otra cosa que necesitan un período de adaptación muy largo. Sin embargo, en la UD Las Palmas ha conseguido poner su sello en un tiempo récord. El grueso de la plantilla, ha admitido el técnico en varias ocasiones, ya sentía ese fútbol como el suyo y los resultados tardaron poco en llegar.
Con ese trabajo adelantado, unos meses que se podrían interpretar de cara al próximo curso como una especie de pretemporada, la UD Las Palmas comenzará con varios kilómetros de distancia sobre muchos de sus rivales. Si el grueso de la plantilla se mantiene, y esa es la intención del club, los amarillos aúnan todo lo necesario para arrancar desde la pole la batalla por la permanencia. Ya no serán unos novatos en la categoría, tienen una idea muy clara de juego que han demostrado que funciona, el entrenador y el estilo se mantienen, disponen de unas arcas preparadas para mejorar la plantilla y disfrutarán de unas vacaciones largas y merecidas. Los jugadores podrán desconectar y la entidad contará con tiempo más que suficiente para acertar en sus decisiones. El panorama, a tres meses para que arranque la Liga, es bastante ilusionante. La Primera División ya no impone tanto como hace un año. Esta UD le mira a la cara con ojos desafiantes.
Bajas y enigma con los cedidos
Club, dirección deportiva y cuerpo técnico ya han dibujado el boceto de la próxima plantilla. Juan Carlos Valerón se retira, no seguirán Ángel López y Nauzet Alemán, con los que se negocia la rescisión de sus contratos, Wakaso no volverá tras finalizar su cesión y Nili Perdomo, que contaba con ficha del filial, saldrá a préstamo. Los 24 efectivos con los que contaba Quique Setién en el tramo final de competición se convierten, de esta manera, en 19. Y es que con Momo, Javi Garrido y Willian José, que finalizan su vínculo el 30 de junio, se negocia su continuidad.
Una de las obsesiones del cántabro es la de reducir el número de miembros del plantel. El técnico sufre cuando tiene que dejar a jugadores en la grada y ha cifrado en 23 la cantidad ideal de efectivos. Así, llegarán, tal y como ha anunciado la dirección deportiva esta semana, tres refuerzos: un lateral derecho y dos extremos. Estos tres fichajes, unidos al regreso de Javi Castellano, elevan el número de jugadores a los 23 que desea el cuerpo técnico.
Hay más jugadores con contrato, pero solo unos pocos tendrán la oportunidad de ganarse un plaza en la pretemporada. El club tiene cedidos a Tyronne del Pino, Héctor Figueroa, Jesús Valentín y Christian Fernández (Huesca), Alfredo Ortuño (Real Mallorca) y Asdrúbal Padrón (Leganés) en Segunda. Además, están José Artiles (Racing de Santander), Leo Ramírez e Ismael Athuman (Cacereño), Adrián Hernández y Carlos Gutiérrez (Burgos). En la parrilla de salida, a tenor de las necesidades del equipo, muy pocos tendrán la posibilidad de hacer la pretemporada. Ortuño es el que mejor está jugando en su club, mientras que Tyronne o Artiles se podrían adaptar bien al estilo del nuevo técnico, que será el encargado de hacer las dos cribas: primero para la pretemporada y después para la plantilla final.
La portería
Es la única línea en la que está garantizado que no habrá movimientos. Javi Varas y Raúl Lizoain forman una combinación de muchas garantías y los dos tienen contrato hasta 2017. Experiencia y juventud que aporta seguridad. No hay motivos para cambiar. Están adaptados a las particularidades del juego de Quique Setién, que obliga a un buen juego de pies, tienen una buena relación y no hacen otra cosa que sumar para el vestuario.
El sevillano, de 33 años, continúa en un estado de forma ideal de reflejos y ha sabido comprender los nuevos elementos que ha tenido que incluir a su juego tras el cambio de técnico. Es un valor seguro. El grancanario, de 25 años, sigue evolucionando en cada partido y en este curso ha vuelto a demostrar que cada vez que juega responde. Asume de manera sana el papel de suplente pero compite por el puesto de titular para no permitir que Javi Varas se relaje. Es la mezcla perfecta que se busca en todos los equipos.
La defensa
Es la línea con más cantidad de interrogantes. Mauricio Lemos y Pedro Bigas, los destinados a convertirse en la pareja de centrales titular, con el permiso de Aythami Artiles y David García, están muy cotizados en el mercado. Por el uruguayo ha hecho una oferta el Barcelona y le siguen otros grandes de Europa. Y por el balear, con quien la UD negocia una mejora de contrato, pues acaba en 2017, suspira el Valencia.
En la pizarra de la próxima temporada están los nombres de Lemos, Bigas, Aythami y David García como centrales. Los cuatro han dado seguridad a la defensa en la mayoría de tramos de la competición y dan plenas garantías. En caso de que uno salga llegará un refuerzo.
Ese condicional no existe para el rol de lateral derecho porque la UD ya busca uno en el mercado. David Simón, que fue de más a menos en este curso debido a una sensible lesión en la espalda y al rendimiento de David García, tendrá más competencia. Y no será Ángel López, con quien se negocia para rescindir el contrato.
En el lateral izquierdo continuará Dani Castellano, el que más minutos ha acumulado, y hay conversaciones para que haga lo propio Javi Garrido. Gusta el perfil del vasco por su experiencia y profesionalidad, pero la entidad le pide un esfuerzo económico.
Los mediocentros
Es la zona del campo más congestionada de jugadores. Y el deseo del club es que ninguno salga. Roque Mesa y Vicente Gómez fue el doble pivote que más repitió, pero tendrán que competir con el regreso de Javi Castellano, de un Hernán que ha sufrido varias lesiones y con la continuidad de Ángel Montoro.
Setién, si todos continúan, tendrá una gran variedad y polivalencia. Todos pueden actuar de pivotes en un 4-1-4-1, sistema que repitió el cántabro durante la gran racha. Javi Castellano y Hernán, además, pueden ejercer de centrales en caso de urgencia. Mientras, Roque, Vicente Gómez y Montoro están capacitados para moverse en la mediapunta. Todos se mueven en una franja de edad comprendida entre los 25 y los 28 años.
Roque ha sido el jugador más regular del equipo en este curso, pero Vicente y Hernán también tuvieron picos muy altos de forma. Montoro cumplió cuando tuvo minutos y con Javi Castellano vuelve el jugador clave para Paco Herrera en el año del ascenso. Son inteligentes tácticamente, están preparados para robar la pelota y dar intensidad al juego. Cada uno tiene sus particularidades pero con todos Setién se garantiza presentar su sello de toque.
Mediapuntas y extremos
Para estas demarcaciones ya está decidido que continuarán El Zhar, al que le llegará competencia, Tana, Jonathan Viera y Momo, a cuyo puesto de extremo izquierdo llegará otro jugador. Así, es donde más cambios habrá ya que saldrán Juan Carlos Valerón, Wakaso, Nauzet Alemán y Nili Perdomo.
El principal deseo de Setién es el de dar más verticalidad y profundidad a su juego, y para ello la dirección deportiva, que está de acuerdo, busca a dos extremos rápidos. Con Tana, Jonathan Viera y Momo, así como con los mediocentros, la UD tiene a muchos jugadores de gran calidad que piden el balón al pie. Y necesita algo diferente, jugadores capacitados para sorprender.
Los delanteros
El planteamiento inicial es que Willian José y Sergio Araujo continúen. Sin embargo, el club tiene que negociar con el fondo de inversión la continuidad del brasileño como cedido, mientras que no se descarta un traspaso para el argentino si llega una buena oferta.
En caso de que haya cambios la entidad buscaría dos jugadores del mismo perfil: un delantero corpulento que la pida al pie y que sea rematador, y otro que ofrezca desmarques en velocidad y caiga a las dos bandas.
Sea como fuere, lo que está claro es que la UD volverá a tener solo dos delanteros en plantilla, algo que ha funcionado pero sobre lo que hubo dudas en enero, cuando la entidad quería fichar a otro pero Setién lo descartó. Fue otro acierto del cántabro, cuya continuidad lo facilita todo.
