Talento con denominación de orige. El precio de la magia. El acuerdo del teldense Roque Mesa con el Sevilla [se ha comprometido hasta junio del 2020] vuelve a poner de manifiesto la belleza del vivero de los lingotes de oro. Mientras la entidad andaluza, actual campeón de Liga Europa y que jugará la próxima campaña en Champions, traslada la segunda oferta por el centrocampista, se volvería a repetir la película de la marcha de Vitolo o Viera.
En el caso del extremo internacional del barrio de San Cristóbal, la entidad hispalense abonó en junio del 2013, tres millones de euros. Tras solo tres campañas de amarillo -completó 90 partidos-, Vitolo daba el gran salto de su vida. Con Emery, no solo alcanzó la condición de internacional, sino que conquistó tres Copas de la UEFA. Con el Sevilla ya suma 134 duelos. Y su baja en la Eurocopa provocó una enorme polvareda. Una injusticia manifiesta, para uno de los atacantes más letales de Primera.
Por su parte, Jonathan Viera, apodado Romario se fue al Valencia por 2,5 millones en mayo del 2012. En el cuadro che, debutó en Champions ante el Bayern de Múnich y firmó 26 encuentros. Tuvo que salir cedido al Rayo y recalaría en el Standard de Lieja, antes de iniciar su etapa en la UD. La mejor de su carrera: ascenso y consolidación en el planeta Messi con diez dianas.
Pero fue el internacional Antonio Guayre, con seis millones al Villarreal, el campeón de los traspasos. Fue en 2001, con solo 20 años y 31 duelos en Primera en el curso de su debut. Valerón -al Mallorca- dejó la Isla por 2,3 millones. Jorge voló al Calderón por 4,5. Ángel, a Balaídos por 1,2 y Aythami, al Dépor, por 618.000 euros. Carmelo, al Levante -420.000-. La venta de Rubén y Momo al Dépor liquidó una deuda de 4 'kilos'. La pasarela del glamour.
