El Sevilla cerró ayer la llegada de Matías Kranevitter, mediocentro del Atlético de Madrid que se incorpora como cedido por una temporada, pero volverá a la carga por Roque Mesa. Jorge Sampaoli, nuevo entrenador del conjunto hispalense, pidió dos refuerzos como mínimo para el centro del campo y la llegada del argentino, ex de River Plate, no obstaculiza las negociaciones con la UD Las Palmas para hacerse con el teldense. De hecho, tanto Kranevitter como Roque son las dos prioridades del exseleccionador chileno.
En la agenda del Sevilla también se encuentra el mediocentro brasileño Paulo Henrique Ganso, jugador del Sao Paulo por el que el club de Nervión ha ofrecido, según medios andaluces, otros ocho millones de euros. La última oferta por el teldense ascendió a 8,5 millones de euros y fue rechazada por la entidad insular, que continúa pidiendo diez millones de euros. En los últimos días la situación ha estado estancada pero será uno de los asuntos que priorizará Miguel Ángel Ramírez en las próximas horas. Y es que el entorno del jugador sigue confiando en que no será necesario que Roque Mesa comience la pretemporada con la UD Las Palmas. Sin embargo, el jugador tiene claro que se desplazará si la situación no se desencalla.
Mientras tanto el Sevilla no se ha quedado quieto y confirmó ayer la llegada de Kranevitter. El jugador, de 23 años y formado en el River Plate, llegará a Sevilla en los próximos días para pasar reconocimiento médico y firmar su contrato, según comunicó ayer la entidad hispalense, que destaca a Kranevitter como uno de los centrocampistas más cotizados del fútbol argentino, y que ha sido internacional en siete ocasiones.
Fue fichado por el Atlético de Madrid el pasado verano, tras convertirse en campeón de la Copa Libertadores del 2015 y quedarse cedido durante media temporada en el conjunto bonaerense. Desde enero de 2016 jugó en el equipo rojiblanco un total de 567 minutos, repartidos en once partidos, cinco de titular. Ahora el Atlético quiere que tenga más continuidad.
