Las dudas invadieron a la UD Las Palmas a última hora. Cuando el traspaso de Roque Mesa al Sevilla CF estaba prácticamente hecho, la entidad amarilla se replanteó el asunto. El pacto era total. Los 10 millones de euros a los que se remitía la UD Las Palmas habían pasado a un segundo plano y parecía que la entidad se conformaría con los 8,5 millones que tenía el club hispalense sobre la mesa. Sin embargo, la incertidumbre sobre el estado de las rodillas de Javi Castellano y Hernán Santana tambalearon un pacto al que le faltaba la firma.
El guión del traspaso de Roque Mesa al Sevilla daba un giro más. La UD había alcanzado una cifra cercana a sus pretensiones, algo que hubiera hecho de la operación la venta más cara en la historia del club amarillo. "El Sevilla hizo un esfuerzo importante, porque la última cifra en la que nos movíamos era de 8,5 millones. No importa que yo pueda ganar 10 o 18 millones para el club, sino que el equipo sea competitivo. Si vendíamos a Roque debilitábamos al equipo", explicó el presidente Ramírez ayer en la presentación de las equipaciones.
Lo deportivo pasó entonces a un primer plano por delante de lo económico. Las dudas que sembraron la fortaleza de Hernán Santana y de Javi Castellano dieron otra vuelta de tuerca más al asunto. Por un lado, no estaban los diez millones de euros. Por el otro, las dudas con el estado físico de Javi Castellano y Hernán Santana revolvieron a la UD Las Palmas a última hora. Además, la contraprestación que buscaba sacar el equipo amarillo en esta operación a Stellar Group, la agencia de representación que defiende los intereses de Roque Mesa, tampoco iba a llegar a la Isla.
Se trataba del extremo argentino Hernán Toledo. Comprado por casi 8 millones de euros por la empresa de gestión de carreras y patrimonios de futbolistas, buscaba dar el salto a Europa. Ninguno de los supuestos dibujados en el plan de la UD se cumplían: ni habían diez millones, ni estaban seguros de encontrar un recambio de garantías dentro del equipo inmediato -vista las lesiones de Castellano y Santana-, ni estaba el extremo prometido.
Sin negociación
Ayer, Miguel Ángel Ramírez aseguró que ya le comunicaron al Sevilla que no van a desprenderse de Roque Mesa. "Decidimos que hay que seguir potenciando al equipo porque con el tiempo queremos ser un equipo grande y eso se hace poco a poco", resumió.
Con todo eso, matizó que si hubieran llegado los 10 millones en los que tasaron al futbolista, la UD Las Palmas "hubiera cumplido con su palabra" y el culebrón con Roque Mesa se hubiese acabado. "El fin de semana le transmitimos al Sevilla que no queríamos seguir hablando de este tema", concluyó Ramírez.
