¿Cómo han pasado las primeras semanas en Gran Canaria tras su fichaje por la UD?
Adaptándome de a poco así que bueno... Todo lleva su tiempo de adaptación así que estoy tratando de adecuarme a este cambio tan importante para mí, incorporándome al grupo y trabajando día a día. Hace dos semanas que vengo trabajando con el grupo y como decía recién, dispuesto a integrarme lo más rápido posible, con algo de ansiedad por empezar a jugar.
Habla de adaptación, Imagino que se refiere a la Isla y a lo futbolístico.
Sí, exacto. Hay que acondicionarse a lo que uno vive fuera del entrenamiento y a lo que pasa sobre la cancha. Intento hacerlo día a día para poder estar cuanto antes en condiciones y a disposición del técnico al 100%.
¿Cómo lo está llevando?
Uno se encuentra con un montón de cosas distintas. En lo futbolístico, yo vengo de un estilo de juego bastante distinto y creo que tiene su tiempo. Es totalmente distinto, pero estoy tratando de hacerlo lo más rápido posible.
Cuando le llega la oferta de jugar en la UD Las Palmas, ¿visualizó lo que está viviendo ahora mismo? ¿Se imaginaba un club como el que se ha encontrado?
Todos sabemos que el fútbol europeo y, en especial, LaLiga es un torneo muy grande, con equipos de gran nivel. Veía a la UD Las Palmas como uno de esos clubes grandes y es lo que me encontré al llegar. Lo estoy notando tanto en los entrenamientos como en el resto de cosas que giran alrededor de la entidad.
¿Le han parado ya entonces por la calle para echarse una foto con usted?
Sí, sí [se ríe]. Algún que otro hincha me ha reconocido y yo encantado. Desde que llegué el primer día en el aeropuerto había hinchas allí esperando y me sorprendió. Yo lo valoro mucho, es muy importante para el jugador. Es algo que a uno le sirve mucho, ese afecto y ese cariño.
Ha pasado de estar en la Primera B Nacional, la segunda categoría en Argentina, ha fichar por un equipo que juega una de las mejores competiciones del mundo. ¿Le da vértigo este cambio abismal? ¿Lo ha notado?
Ciertamente se nota en lo futbolístico. El cambio de fútbol se nota muchísimo. Ésta es una de las mejores competiciones del mundo y vengo de una segunda división, por lo que sí se nota, pero tengo muchas ganas de intentar convencer.
Aquí se ha encontrado con gente como Kevin Prince Boateng. ¿Cómo esta viviendo esa experiencia?
Justamente, uno tiene que tratar de aprender de futbolistas como él, pero también del resto. Todos acá tienen una trayectoria importante y para uno que recién está dando sus primeros pasos, es esencial fijarse en ellos.
En el apartado personal, ¿ha encontrado apoyos dentro del vestuario?
Sí, he hecho buenas amistades, en especial con Sergio Araujo y Mauricio Lemos, pero todos me han acogido muy bien. Se ve que es un grupo bueno.
¿Con los veteranos como David García o Aythami también?
Sí, por supuesto. Ellos te dan buenos consejos, que esto es un trabajo diario, que no trate de apurarme, que me adapte a poco.
¿Le ha caído alguna novata?
No, no que va, se están portando muy bien [risas].
Sitúe sus orígenes en esto del fútbol.
Pues desde los siete años empecé en Instituto de Córdoba. Pasé por los equipos de todas las categorías hasta debutar a los 17 años y bueno, estuve dos años hasta ahora. Pasé por varios técnicos y aprende uno mucho de cada uno de ellos, unos 15 entrenadores. Eso es algo muy importante.
¿En quién se fijaba entonces?
En Leo Messi. Aún no me puedo creer que vaya a jugar en un equipo como la UD Las Palmas que puede tenerlo de rival, es algo muy lindo.
En sus primeras etapas como profesional, una imagen de su padre besando una foto suya en el periódico antes de entrar al estadio se convirtió en viral en Internet. ¿Podría describir esa historia?
Hasta que salió eso yo no sabía nada, él entraba a la cancha y veía el partido sin más. En los partidos, antes de entrar, te dan una revista y ahí te salía el once titular que iba a jugar en el partido. Cada vez que a mi papá le daban la revistita, antes del juego, él le daba un beso a mi fotografía. Lo hacía siempre. Rezaba y pedía por mí. Un fotógrafo justo lo agarró en ese momento. Después relataron la historia y salió en todos lados, fue muy lindo para mí.
¿Qué importancia tiene la familia en su carrera?
Muchísima, creo que es el pilar de un futbolista. Desde chico ellos eran los que me llevaban a entrenar, los que tratan de llevarte por un buen camino. Les debo mucho.
¿Qué tal con Quique Setién?
Bien, bien... No he tenido mucho diálogo especial con él, pero las veces que hemos hablado me ha insistido en que la adaptación debe ser a poco, que no tenga demasiada prisa por nada. Quiere que trate de comprender cómo es el fútbol de la UD, el juego en España y en Europa. Que no me apure porque la oportunidad llegará cuando tenga que ser.
¿Le agobia ese punto? Me refiero a que no le llegue la oportunidad en las próximas semanas, que solo tenga los entrenamientos para intentar convencer.
Bueno, se dio todo muy rápido en las últimas semanas. Llegué sin hacer la pretemporada con el equipo, aunque sí que estaba ejercitándome en Instituto. Trato de dar lo mejor para intentar convencer al técnico y para sentirme bien conmigo mismo.
Su nombre ha estado muy relacionado con Miguel Ángel Brindisi, mito de la UD Las Palmas. ¿Ha hablado con él?
No, no he tenido la oportunidad. Sabía que Brindisi fue uno de los que me recomendó y que también habló con Luis Helguera. Algo sabía pero no he tenido ese placer.
¿Sabe de la relación histórica del fútbol argentino con la UD Las Palmas?
Algo me han comentado, sabía lo del Turu Flores, por ejemplo. De Araujo también lo sabía, que me está dando mucho apoyo.
¿Confía en ver un tan buen debut en casa como el que tuvo la UD Las Palmas en Mestalla?
Ojalá, de entrada estaría muy bien para la afición. En Argentina no se ve un fútbol como el de acá. Me di cuenta allí en Valencia. Pude estar en la tribuna y disfruté con el juego del equipo. Ojalá pueda ser partícipe de él en poco tiempo sobre la cancha.
