Cuando un equipo con la filosofía de juego de la UD Las Palmas, de vocación creativa, ve cómo esa vertiente se atrabanca, contar con una línea de contención que ayude a sostener las embestidas del rival resulta clave para sumar cuando se pasa por apuros. Y ayer ante el Málaga quedó demostrado que el conjunto amarillo en esa parcela cuenta con hombres de garantías. La dupla Pedro Bigas-Mauricio Lemos, que debuta en el actual curso debido a que la lesión de un pletórico David García permitió el estreno del uruguayo, tuvo una incidencia importante en la consecución de la tercera victoria del presente campeonato liguero.
Si el año pasado esta pareja de centrales resultó trascendental en los éxitos del cuadro que dirige Quique Setién, convirtiéndose en dos de los componentes de la plantilla que más se revalorizaron, en la primera ocasión que han tenido la oportunidad de compartir titularidad, aquellas sensaciones volvieron a repetirse, erigiéndose en dos de los futbolistas más destacados en el encuentro disputado en el Estadio de Gran Canaria.
Pedro Bigas volvió a ser ese muro inexpugnable, sobrado en cada una de sus intervenciones. Ejerció de mariscal en el centro de la zaga ante un ataque de postín como el que presenta un rival como el Málaga. El mallorquín pareció darle aún más razones a Julen Lopetegui para que continúe teniéndolo en cuenta de cara a una próxima convocatoria de la selección española absoluta.
Sólo unos días habían pasado desde que el seleccionador desvelara que el defensa balear era uno de los que seguía de cerca. Pues ayer, el futbolista quiso elevar su condición de futuro seleccionable para la Roja.
Pedro Bigas, inexpugnable atrás, demostró maneras de Kaiser. Expeditivo, elegante y siempre actuando con criterio. Como en una jugada que protagonizó al filo del descanso. Corte atrás, salida con el balón controlado hacia el área malagueña, pase a la banda y remate de cabeza para finalizar la jugada que él mismo había comenzado.
El balear se revaloriza a cada paso adelante que da esta temporada que acaba de iniciarse. Una circunstancia que le hace más fuerte en la situación que ahora mismo vive con el club. Acaba contrato a final de la presente campaña y su renovación, que se lleva persiguiendo desde el verano, continúa dilatándose de una forma que empieza a ser preocupante. A partir del 31 de diciembre, el jugador es ya libre de negociar y firmar con cualquier equipo.
En cuanto a Mauricio Lemos, despejó frente al Málaga las dudas que empezaban a cernirse sobre él al no comenzar como titular después de cómo terminó el pasado ejercicio. También es verdad que su ausencia en la primera jornada por motivo de una sanción dio paso a un David García que ha rayado a un grandísimo nivel, y que solo salió del once esta semana por una inoportuna lesión.
En su estreno liguero, el central charrúa volvió a exponer sobre el verde del Estadio de Gran Canaria las características que le encumbraron desde su llegada. Rudo en el marcaje y sobrio en el corte, demostró la clase que atesora a la hora de sacar la pelota controlada, sobre todo en sus cambios de orientación de una banda a otra. Ahora, cuando David García se recupere, habrá que ver cómo soluciona Setién la difícil papeleta que tiene.
