Aunque las portadas, las imágenes más destacadas por los informativos de televisión y la mayoría de los minutos de las tertulias radiofónicas han ido a parar al cambio de Cristiano Ronaldo, ha habido un hueco en todos los medios de comunicación nacionales e internacionales para la UD Las Palmas. La mayoría consideran que el Real Madrid mereció ganar el partido, pero reconocen que el equipo amarillo fue un gran rival a pesar de que no cuajó su mejor actuación.
Fuera de nuestras fronteras, el diario Olé, el principal diario deportivo de Argentina, titula la crónica del encuentro en Araujo: "Araujo te palma...", escribe en referencia al gol de su compatriota. "El equipo de Zidane se estaba quedando con los puntos pero un argentino apareció para salvar al local a cinco minutos del final", continúan sobre el autor del 2-2.
"Las Palmas tuvo a menudo la sartén por el mango en el centro del campo", escribe La Gazzetta dello Sport en Italia, y añade que los amarillos fueron "un hueso duro". "La iniciativa y las ideas de Tana y Viera se lo ponía difícil a la defensa del Real Madrid", añaden en un periódico que pone mucho el foco en Prince y Livaja, que pasaron por el país transalpino.
No lejos de allí, en Francia, el diario L'Equipe también destaca el juego de Las Palmas: "El gol inicial del Real Madrid no desestabilizó a los locales, que generó un montón de problemas a los blancos con sus pases cortos", se puede leer en el diario deportivo francés de referencia. Y continúan diciendo para justificar el empate de Araujo que "Las Palmas no es la revelación de la Liga por casualidad".
En España, el diario El Mundo destaca la fidelidad de la UD a su ideario: "La norma de salir con la pelota en los pies es sagrada para Quique Setién, que tiene jugadores para hacerlo, como Roque Mesa o Jonathan Viera. No es posible entrenar y jugar de esa forma toda la temporada y cambiar cuando llegan el Madrid o el Barcelona. Mejor dicho, es posible, pero no tiene sentido. Lo que ocurre es que hay que jugar con el balón en los pies y el rosario en la mano, porque un error es medio gol", indica Orfeo Suárea en su crónica. "Cuando el equipo insular superaba esa primera línea de presión del Real Madrid, era capaz de tocar y armar la jugada con facilidad en los medios", continúan.
"Las Palmas, un meritorio equipo de autor, le mantuvo al Madrid el pulso esgrimista durante 45 minutos, aguantó como pudo tras el intervalo y se encontró con el gordo con un rebote final, cuando ya no sentía la mandíbula ante un Madrid muy superior", escribe José Samano en su crónica para El País. "Los de Quique Setién no cambiaron de equipaje y asumieron los riesgos que acostumbran. Desde la cueva, la pelota de pie en pie, pese a que Varas no sea un experto con las botas y falten los centrales más asiduos. Al conjunto canario le costó más de espanto, pero no se doblegó aunque el Madrid le achuchó de lo lindo", añade.
"Las Palmas se movió en la primera parte con su conocido buen estilo, sacando siempre el balón jugado, si bien con algunas imprecisiones que le costaron algunos sustos y un gol", relata Alfredo Relaño en su editorial del As. "La UD creció mientras se asoció con la pelota. La escuela canaria está magníficamente representada con el equipo de Setién. Aparecieron Roque, Tana, Momo y Viera para robarle el balón al Madrid, que terminó por recular", sentencia la crónica del diario Marca.
