La plenitud de Roque Mesa no es solo deportiva. El centrocampista de la UD Las Palmas fue padre ayer por segunda vez tras el nacimiento de su hija India, fruto de la relación sentimental que mantiene con su esposa Patricia Blanca.
Un motivo que provocó que el centrocampista de Telde se perdiera el entrenamiento matinal de ayer que tenía programado Quique Setién. Una sesión casi sin carga donde primaron los juegos con el balón.
Tanto que hasta el propio cuerpo técnico -a excepción de Rafa Cristóbal, el readaptador Jesús Suárez y el preparador de porteros Zeljko Cicovic- se retiró del entrenamiento antes de que finalizara. El motivo estaba en el Anexo del Estadio de Gran Canaria. Y es que tanto Quique Setién como Eder Sarabia presenciaron en directo la evolución del filial, que empató ayer (1-1) ante la UD Lanzarote en la novena jornada de Tercera.
