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La finca de David García

El capitán, de 34 años y con tres goles en Primera, estrenó su faceta realizadora en El Madrigal el pasado marzo

David García, jugador de la UD Las Palmas, señala la imagen de la celebración de su gol al Villarreal en marzo. LP / DLP

David García, muralla y estilete, vuelve a El Madrigal. Es su finca, el territorio en el que vivió un punto de inflexión en su carrera reciente de amarillo. El capitán de la UD Las Palmas, de 34 años, con 25 partidos en la máxima categoría, guarda un excelente recuerdo de su paso por la caldera del Villarreal -rival de mañana, desde las 17.30 horas y televisado por BeIn LaLiga-. En el feudo del Submarino amarillo, estrenó su condición de artillero en la liga de las estrellas en un episodio para la historia. El pasado 5 de marzo, el bloque isleño se impuso (0-1) para firmar la primera conquista en el jardín del conjunto castellonense.

Una jugada de pizarra, certificada con un remate inapelable, elevó a los altares a una figura eterna, que computa 421 duelos oficiales con la UD -lucha por igualar las cifras del mito Germán Dévora, con 453. Aquel gol del zaguero sureño estiró la borrachera de triunfos, seis en siete jornadas, de la 26a a la 32ª en la 2015-16, en la denominada primavera de oro de Setién. Como lateral derecho, jugó un papel crucial en la resurrección de un ejército que parecía condenado al infierno tras sucumbir en Vallecas.

Batir al meta Areola -ahora en el PSG- fue el estímulo perfecto para este pistolero inesperado [ya cuenta con 15 tantos en su carrera, que comenzó en la 2003-04]. David García también marcó en Riazor (11 de abril en la victoria por 1-3 al Dépor) y ante Osasuna, en el último desplazamiento de la UD (2-2). En El Sadar, el veterano zaguero rescató un punto milagroso. Al borde del abismo, volvió a aparecer como un ángel bendito. Tres tantos en la mejor liga del mundo y en los últimos ocho meses. La misma cosecha que, por ejemplo, Sergio Araujo, afamado pistolero de la UD Las Palmas.

El defensa regresa ahora a El Madrigal como un central inexpugnable y no como lateral. Le ha ganado la partida a Mauricio Lemos y a Aythami Artiles. Solo Pedro Bigas parece insustituible junto al de Maspalomas. Inmortal, termina contrato el próximo junio de 2017 y su continuidad parece más que asegurada. Su rendimiento, como demostró ante el Espanyol, al tirarse al suelo, junto al palo, para congelar un remate periquito, no tiene fecha de caducidad. Conoce el padecimiento, tras purgar sus pecados por el infierno de la Segunda B y Segunda A. Y ahora se codea con los gigantes del balón.

Mañana tendrá una oposición de quilates. Bakambu, Pato, Castillejo, Sansone... pero nada inquieta a un combatiente que parecía listo para la jubilación. Rigor, compromiso y pegada. Letal en las dos áreas, David García, protagonista en los dos últimos ascensos, encadena su 14a campaña de amarillo. Y sigue al frente de la legión de plátano. Un capitán de pólvora. Objetivo: volver a incendiar El Madrigal.

El Submarino respira intratable, se mantiene invicto en Liga y Liga Europa. Pero la UD ya hizo historia el pasado marzo. En este caso, será más complicado. El bloque de Fran Escribá solo ha recibido cuatro tantos en las primeras ocho jornadas. Pero el ejecutor de Maspalomas está especializado en las causas imposibles. Junto con Aythami Artiles, tuvo que lidiar con Cristiano Ronaldo y Bale hace unas semanas.

Bigas y una pareja de etiqueta

Toca otra prueba de fuego. Y en el jardín donde descubrió su talento más oculto. Para ello volverá a contar con la compañía de Pedro Bigas, con el que se asoció en las tres primeras jornadas para noquear a Valencia y Granada y sucumbir ante el Sevilla de manera agónica. El central mallorquín ha superado ya el trance de una lesión muscular y tras disputar unos minutos la semana pasada ante el Espanyol apunta al once a pesar de las buenas maneras de Aythami Artiles. Pero tanto Bigas, que apunta a la selección, como David García están pletóricos. El balear, con Gerard Piqué y Sergio Ramos lesionados y una nueva convocatoria de Julen Lopetegui en menos de un mes, está en condiciones de hacer realidad el sueño de la Roja.

Han sido la pareja titular siempre que los cuatro centrales han estado en plenitud y todo apunta a que volverán a formar el once titular en El Madrigal. La UD les necesitará para asaltar un campo que no conoce la derrota local. Pero los amarillos ya conocen el camino.

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