Cuando un acta de un jurado otorga un premio, en su descripción no suele aparecer la palabra conceder. En su lugar, aparece fallar. Los tribunales de los concursos no dictan, fallan. Y, aunque en el diccionario se encuentrn acepciones distintas para fallar, como hecho de errar en algo; y fallar, como la decisión de un jurado al adjudicar un premio, ambos significados están unidos de la mano. Los premios, como norma general, nunca dejan satisfechos a nadie; siempre hay pensamientos discordantes.
Los premios de la Liga de Fútbol Profesional han esquivado a la UD Las Palmas una y otra vez desde su irrupción en la temporada 2008-2009. Durante estos años la entidad amarilla solo puede presumir de tener a un futbolista entre los elegidos por la LFP. El extremo grancanario Vitolo Machín, hoy en las filas del Sevilla, es el único jugador amarillo que se ha llevado un premio en la gran fiesta que monta la competición. Su gran última temporada en la disciplina amarilla (la 2013-2014) le valió para recoger la distinción como mejor centrocampista atacante de la Segunda División, aunque recogió el premio ya como futbolista del conjunto hispalense, que lo reclutó durante ese verano.
Desde entonces, la UD ha sido casi invisible para la LFP. Un año después, Juan Carlos Valerón fue nominado a mejor centrocampista, una distinción que no se llevó. Por ejemplo, los 25 goles que hizo Sergio Araujo con la camiseta amarilla en Segunda División tampoco fueron suficientes para entrar entre los tres nominados a ser el mejor delantero de la categoría de plata. Rubén Castro -ganador del premio- del Betis, Borja Bastón del Zaragoza y Jorge Molina, también del Betis, dejaron fuera al delantero argentino, autor del tanto del ascenso.
A Paco Herrera sí lo nominó la LFP en la campaña del ascenso. Sin embargo, el entrenador ya estaba fuera del club cuando se repartieron las distinciones. El trofeo fue a parar a las manos de Pablo Machín, entrenador del Girona.
Este año, futbolistas como Roque Mesa o Vicente no han podido estar ni tan siquiera nominados a premios como el de mayor revelación. Cuestión de criterios y fallos en cada ronda de premios.
