Koke Contreras dejó un gratísimo recuerdo en los seguidores de la UD Las Palmas. Después de doce años, el genial exjugador internacional chileno regresará a la que, durante seis temporadas, fue su casa, invitado a la proyección del documental Tardes de Gloria, la obra del director canario Gustavo Socorro sobre la entidad amarilla.
¿Cómo ha vivido estos días en los que está cerca su regreso a Gran Canaria?
Puedo decir que los he vivido contando las horas que faltan para retornar a un lugar que llevo en el corazón y donde me trataron de maravilla.
¿Cuánto tiempo ha pasado desde su última visita?
Al acabar mi etapa de jugador volví a Chile y estuve varios años más jugando. Volví en una ocasión para jugar un cuadrangular con Universidad Católica, y luego viví de nuevo en la Isla desde 2000 a 2004, en que regresé a Chile. Desde entonces no he vuelto, por lo que hace ya doce años que no voy.
Otros cuatro años pasó entonces viviendo en Gran Canaria. ¿Qué hizo en ese tiempo?
Hice varias cosas. Proyectos con algún amigo paisano. Trabajar en varias cuestiones. Incluso trabajé un tiempo para la UD Las Palmas, pero luego lo dejé, porque unos cuantos nos fuimos al hacer causa común con Tino Luis cuando le destituyeron. También estuve trabajando para la UD San Antonio, con un equipo de juveniles, e hice colaboraciones en algunos medios de prensa comentando los partidos.
¿Echa de menos su estancia en la Isla?
En muchas ocasiones lo he pensado. No me arrepiento de nada de lo que he hecho desde que salí de la UD Las Palmas, pero sí que en ocasiones he pensado que me gustaría volver y trabajar ahí.
¿Por qué se fue de la UD Las Palmas? ¿No le ofrecieron quedarse más tiempo?
Me ofrecieron seguir. Los dirigentes, empezando por don Jesús, estaban locos porque me quedara. Me querían renovar por cuatro temporadas más. Pero yo venía de jugar dos años antes la Copa América con Chile, en la que llegamos a disputar la final frente a Uruguay. Recuerdo que le ganamos a Brasil por 4-0. Volví a Las Palmas y estaba bien, muy bien, pero tenía ya un nombre en mi país, volvía a jugar con La Roja, y me salió una gran oportunidad con el contrato que me ofrecía Católica, por lo que me decidí a regresar a Santiago. Ya digo que no me arrepiento de nada, pero a veces he pensado que debí aceptar la continuidad en la UD Las Palmas.
Y ahora le invitan para regresar a la Isla. ¿Qué le supone ese regreso?
Cuando contactaron conmigo para cursarme la invitación no me lo creía. He tenido que lucharlo con mi club actual para poder ir, porque me apetece muchísimo ir. Lástima que sea un tiempo cortito, pero en Barnechea no me permiten más tiempo. Regresar a la Isla me supone muchas cosas. Verme ahí, con tantos y tantos amigos, me emociona. Es una ocasión muy especial y con el orgullo de haber sido invitado. Van a ser muchas emociones juntas. El club, la Isla, la gente... todo ello es una parte muy importante de mi vida. Ya digo que va a ser un tiempo muy cortito, pero lo voy a aprovechar al máximo. Va a ser muy especial por todo lo que me dieron como futbolista y como persona.
Dice que su club, Barnechea, no le deja más tiempo. ¿Qué hace ahí en el club?
Estoy al frente del cuadro técnico. Militamos en Segunda profesional, que viene a ser como la Segunda B de España. No pude salvarle del descenso la pasada campaña y seguí al frente del equipo en la presente. Vamos segundos. El viaje me va a suponer un gran problema, porque este sábado -ayer- jugamos en el norte, a ocho o nueve horas de bus de Santiago. Así que nada más terminar el partido con Vallenar nos volvemos a la capital, porque a mediodía del domingo -hoy- tengo el vuelo para Madrid y desde allí a Gran Canaria, donde llegaré a media mañana del lunes. Mientras esté fuera mis ayudantes realizarán los entrenos.
¿Y cuando se vuelve para Santiago?
Sí o sí tengo que estar el día sábado 19 en Santiago. Ese día jugamos frente a Melipilla, que es el equipo que va puntero, marcha invicto, y del que estamos a dos puntos, por lo que nos jugamos el liderato. Por eso quieren que regrese y esté para este partido.
¿Le va bien como técnico?
He hecho cositas. De momento ya te digo que con Barnechea vamos segundos. Me estoy labrando un futuro y, ¡quien sabe! -risas- a lo mejor termino entrenando a la UD Las Palmas en alguna ocasión.
¿Lo dice convencido?
¡Ojalá pueda ser cierto! Es un sueño, una ilusión que tengo desde que me recibí como técnico.
¿Ha seguido al equipo en esta temporada?
La verdad que bien poco. Vi el partido con el Sevilla, en el que no mereció perder. Acá no están pasando todos sus partidos y, aunque veo resúmenes y lo sigo por las redes sociales, si han pasado algún otro partido pues igual me ha coincidido con que yo tengo que dirigir y por ello no lo he visto. Pero estoy al tanto de sus resultados. Sé que estuvo puntero varias fechas y que luego no ha tenido buenos resultados, aunque en esos partidos ha sido merecedor de más. Hay una sensación muy especial. La opinión que se da en torno al fútbol que manifiesta llama mucho la atención desde el inicio del campeonato.
¿Y de sus jugadores actuales, qué conoce?
Pues te diré que me ha llamado mucho la atención Tana. Juega bien y da mucho movimiento al equipo. Sé de Lemos y de Araujo por ser sudamericanos, aunque el argentino este último año no ha tenido mucha producción y además se ha metido en un buen lío. En mi última estancia en Las Palmas conocí a Aythami, y me alegra que haya llegado al primer equipo, como hicieron entonces Ángel, Guayre y Jorge. Estuve muy pendiente de la despedida de Juan Carlos Valerón. ¡Vaya jugadorazo! Ponía muy en alto el fútbol canario. Ya le conocía de su época anterior en Las Palmas y seguí su trayectoria en el Mallorca, Atlético y Deportivo. Un genio del fútbol.
¿Y qué opina de Silva, el grancanario que más lejos ha llegado?
Me deleito viéndole. Sigo todos los partidos del Manchester City, porque es un jugador que me encanta. Gozo con su fútbol, porque es el prototipo del fútbol canario.
¿Y no conoce a ninguno más de la plantilla actual de la UD?
También me ha llamado mucho la atención un chico que me recuerda a Chinea, aunque con más calidad técnica. Me lo recuerda porque es todo pundonor y fuerza, y además tiene sentido del fútbol. De lo poco que he visto del equipo, Roque Mesa me parece muy interesante.
¿Y qué parece el nivel de Jonathan Viera?
Me han hablado mucho y bien de Jonathan Viera, pero no he tenido ocasión de verlo. Quiero verlo más, pues me han dicho de su gran calidad técnica y me fío mucho de quienes me han hablado de él.
Volvamos un momento al pasado, ¿quiénes fueron sus mejores amigos y compañeros?
Todos en general. Con todos me llevo estupendamente, pero quizá tengo más contacto y más lo que podríamos decir feeling con Javier Campos y con Benito. Eran mis amigos del alma, junto a sus familias. Con Javier porque, desde que llegué a la UD, fue mi compañero de habitación y en los entrenamientos siempre hacíamos pareja. Y con Benito porque es, como te diría, una maravilla de persona, todos le queríamos de forma muy especial, y con él y su familia salíamos muchas noches a cenar. Los tres estábamos siempre juntos.
¿Qué gol recuerda con más cariño de los muchos que anotó con la UD Las Palmas?
¡Uffff! Hay muchos goles que marqué con la UD Las Palmas que me traen muy buenos recuerdos como para decidirme por uno solo. Está por ejemplo el penal que le marqué al Real Madrid cuando ganamos 4-3 en el Insular. Los penales los estaba tirando otro compañero porque yo ya había fallado tres ese año. Pero Juani cogió el balón y me lo dio a mí y me dijo "toma, chileno, mételo". Tomé el balón y le pegué con toda mi alma, y sirvió para ganar el partido. Y me gusta recordarlo porque siempre me preguntan por ese partido, que además mucha gente se enteró que habíamos ganado al día siguiente, porque se fueron del estadio cuando aún perdíamos 1-3. También recuerdo otro contra el Barcelona en un partido de Copa del Rey. Yo había comentado con los compañeros durante la comida, que si había una falta se la iba a colar a Urruti, distinta de otra que le había marcado en otra ocasión. En aquella, se la tiré por encima de la barrera y les dije que esta vez se la iba a tirar a su palo, para batirlo. Hubo la falta, se la tiré como pensé y le marqué, porque él se la esperaba por el lado de la barrera.
¿Alguno más?
Hubo otro, también en Copa, contra el Castilla de Butragueño, Michel, etc. Nos habían ganado en Madrid 2-0 y en la vuelta alcanzamos a igualar en el tiempo reglamentario. Luego, en la prórroga, les hice un gol cabeceando con la coronilla o la parte trasera de la cabeza. No se lo esperaba el portero que yo rematase así, pero era un remate que solía hacer mucho, ya desde que jugaba en Palestino y otros equipos en Chile. Recuerdo que Héctor Núñez dijo en una ocasión algo así como que "éste es un cabezón, le pega más fuerte con la cabeza que con el pie". Si me pongo a recordar no paro de hablarte. Tengo muchos goles en la cabeza. Por ejemplo, otro que le hice al Valencia en Mestalla que se la eché por encima al arquero. Al Valencia le hice muchos goles, se me daba bien (sonríe).
La verdad es que sí, que si le dejamos que haga volar su memoria seguirá recordando goles y goles. Pero, ¿cuál fue su mejor año de amarillo?
No sé... Los seis años que estuve en la UD Las Palmas fueron sensacionales. El año del ascenso con Roque Olsen fue espectacular, y lo logramos varias fechas antes de acabar el campeonato. Con el pichón Héctor Núñez, un gran tipo como persona y un gran técnico, no tuvimos suerte. Fue muy importante en mi adaptación a la UD.
¿Qué otras anécdotas tiene, con los aficionados amarillos, por ejemplo?
Hay muchas anécdotas con el público. Una que recordé recientemente en un programa que me hicieron en una televisión de aquí, de Santiago, en el que la comentó Javier o Benito, porque hablaron con ellos vía telefónica, fue cuando me sacaron del Insular a hombros y me llevaron hasta la puerta del piso, de mi casa, en el edificio que estaba frente al Estadio. Eso no ocurrió una, sino varias veces. Yo en ocasiones me tardaba en salir del vestuario tras el partido para evitarlo, pero los aficionados me esperaban y de buenas me veía una cabeza metida entre mis piernas y todos me elevaban. En otra ocasión me llevé una reprimenda grande de don Jesús, porque le hice un corte de mangas a un aficionado en el Insular. Yo no no tenía el día. Y el aficionado me tenía loco recorriendo todos los pasillos del Insular y metiéndose conmigo. "¡Chileno, vete para tu casa!", me decía. Yo echaba chispas. Pero resulta que metí gol y agarré a correr hacia donde estaba él y le dije: "¡esto para tí!", y le hice un corte de mangas. Don Jesús me llamó a capítulo, muy enojado. Yo sólo le pude decir que lo hice como reacción a todo lo que le había aguantado. Con el tiempo, un día por la calle se me acerca un señor y me dice "¡Hola, Koke!, ¿te acuerdas de mi?". Y le contesté que no, que lo sentía. Entonces me dice: "Soy aquel al que le hiciste un corte de mangas". No sabía donde meterme y le pedí mil y una disculpas, pero el señor se portó muy bien conmigo, no le dio ninguna importancia y acabó diciéndome que no pasaba nada y que era un gran jugador.
Ésa es buena... ¿alguna otra?
También una vez yo estaba muy enojado, porque ¿recuerdas qué coche tenía yo?
Pues sí, uno color azulado...
Sí, se que lo recuerdas. Un Honda azul. Pues alguien me lo rayó y me agarré un gran cabreo. Puso Koke en la puerta. Entonces, resulta que voy a Correos a poner una carta o hacer alguna diligencia, y dejé el coche mal aparcado. Vino un guardia y me iba a multar, pero preguntó a mi señora por qué ponía Koke en la puerta y ella le dijo "Es que éste es el coche de Koke Contreras", y el agente dijo: "¡Pues entonces no lo multo!". La verdad que el trato que recibí siempre ahí fue espectacular. Me quedo con ese cariño que me tiene la gente, que aún hoy día corean 'Koke, Koke' en el estadio cuando hay una falta, según me dicen. Me llega al corazón y me emociona muchísimo. Yo solía salir mucho, digamos que de excursión, para conocer todos los rincones de la Isla. A veces hasta ni me cobraban en los restaurantes donde comía por los pueblos por el hecho de ser Koke, y eso me reconforta al recordarlo. Les debo mucho y por ello digo que seré muy feliz al regresar a la Isla.
Por último... ¿Sabe con quienes se va a encontrar en estos días en la Isla, qué otros jugadores han sido invitados como usted?
No lo sé. Sólo me han comentado, o lo he visto por redes sociales, que va a ir Brindisi. Nunca coincidí con él, pero me gustaría conocerlo, porque le tengo un gran aprecio. Don Jesús me comparaba mucho con él y me decía que no quería perderme como perdieron a Brindisi, que no estuvo en la UD Las Palmas todo el tiempo que ellos querían. La verdad es que me gustaría darle un gran abrazo, porque era un genio del fútbol.
