El entrenador del Athletic Club, Ernesto Valverde, ha admitido tras la derrota por 3-1 en el Estadio de Gran Canaria ante la UD Las Palmas que su equipo no ha estado acertado, y el segundo gol encajado, al inicio de la segunda parte, les ha hecho "mucho daño" y les ha dejado "tocados".

El técnico del conjunto vizcaíno ha dicho que el encuentro ha tenido "muchos tramos", porque empezaron "mejor" que su rival, pero después Las Palmas "sacó mejor su juego y ha venido su primer gol".

Valverde ha explicado que en la segunda mitad intentaron lanzar la presión más alta, pero una pérdida de balón provocó el 2-0, a pesar de que después, tras la expulsión de Aduriz, dominaron, marcaron de penalti y no empataron "de milagro" tras una gran parada de Javi Varas.

Sin embargo, ha reconocido que no han dominado el juego como les hubiera gustado, con muchas pérdidas de balón, y todo se les ha puesto "cuesta arriba", porque la Unión Deportiva ha tenido "espacio" cuando han arriesgado.

Respecto a la expulsión de Aduriz, ha dicho: "Sabemos cómo es, estaba nervioso, a veces protesta y no tengo mucho que decir, es una apreciación del árbitro".

Valverde considera "difícil" que se puede recurrir la expulsión y admitió que será una baja "importante" para el próximo partido, así como la de Raúl García por acumulación de amonestaciones.

Por otra parte, ha asegurado que desconoce el interés del CD Leganés por el guardameta Herrerín, y no ha "madurado" la posibilidad de dejarle marchar tras la baja de Serantes hasta final de temporada en el conjunto madrileño por una grave lesión.