Al Leganés lo ha mirado un tuerto; quizá se haya cruzado con un gato negro. Puede también que de paso se haya escurrido por debajo de una escalera, haya roto un espejo o esté abonado al número 13 en la lotería. Igual se ha dedicado a jugar con la sal, abrir su paraguas dentro de una casa o ha perdido un guante. Porque lo del conjunto del sur de Madrid va más allá de la mala suerte.
El Leganés, que debuta esta temporada en Primera División, ha visto como se le complican las cosas un poco más, como el fútbol le ha buscado una nueva vuelta de tuerca a su propósito de seguir la próxima temporada en LaLiga. Porque el conjunto pepinero llega a Gran Canaria con ocho bajas, ocho futbolistas que el técnico Asier Garitano no podrá alinear frente a la UD Las Palmas.
Pero el drama es aún mayor. Porque de esas bajas hay algunas de gravedad, tanto por el alcance de las lesiones como por la importancia que tienen sus protagonistas en el equipo. Y es que futbolistas como Alexander Szymanowski, Jon Ander Serantes, Diego Rico o Róber Ibáñez no entran en los planes de Asier Garitano a corto plazo.
Noviembre, mes negro
La victoria del CD Leganés ante el Osasuna le salió cara. Los tres puntos se canjearon por otras tres lesiones. Fueron las de Róber Ibáñez, autor de dos goles y que se perderá la temporada por una rotura de ligamentos de la rodilla; la del argentino Szymanowski, con un esguince de grado II en la rodilla, y la Diego Rico, con una fuerte contusión y un esguince del ligamento cruzado anterior acompañado de distensión muscular posterior del muslo de la pierna derecha.
Una semana después, Jon Ander Serantes caía lesionado, también de los ligamentos de la rodilla, para perderse toda la temporada. Definitivamente, el Leganés parece estar gafado en ese aspecto. Sin embargo, los pepineros parecen estar por encima de los problemas.
La semana pasada, el club madrileño incorporó a Iago Herrerín, portero del Athletic Club hasta final de la temporada. En su debut, el guardameta vasco consiguió encandilar a Butarque en el empate sin goles que sacó ante el Villarreal. Prácticos en su fútbol, el Lega ha sacado cuatro puntos de los últimos 21 en juego. Sin pasar por su mejor momento, castigados por las lesiones, fuera de casa han conseguido dar dos buenos golpes. El primero, en la jornada inaugural ante el Celta de Vigo; y la segunda frente al Granada. Dos victorias que ya quedan algo lejos para un equipo con hambre que busca sobreponerse a las ausencias.
